El expresidente fue tentado de recibir una copa de aguardiente en el barrio Belén de Medellín; sin embargo, decidió tomar agua y unirse al brindis.
Álvaro Uribe sigue alimentando las manifestaciones de los ciudadanos de Medellín en contra de Daniel Quintero, con quien tuvo serias diferencias hace unos días por un Twitter. Incluso, la esposa del alcalde también se vio involucrada y tuvo su encontronazo con el expresidente en redes sociales.
Precisamente, Uribe ha aparecido en estos días en el barrio Belén, de Medellín, donde incluso se le vio en otra faceta, vestido de mesero y repartiendo buñuelos en una panadería de la comuna 16 de la capital antioqueña. El exmandatario compartió con los habitantes del sector y escuchó sus reclamos para que él los defienda ante el Gobierno Nacional.
El líder del Centro Democrático vivió otro episodio jocoso en el barrio de Medellín. En su caminata por las calles se encontró con un grupo de personas que estaba departiendo en una tienda del sector y una mujer con copa de aguardiente en mano lo invitó para que se tomara un trago y brindara en contra del presidente Gustavo Petro.
Álvaro Uribe y su episodio con la copa de aguardiente, en Medellín
“Petro no, eso es un hijue…, tómese uno pues”, le dijo la señora al expresidente que iba con su grupo de escoltas.
Uribe decidió no recibirle el trago, pero si aceptó una botella de agua que estaba en la mesa y se la tomó toda de un solo sorbo. La cantidad de personas que estaban en el sitio se unieron en un sonoro aplauso y el expresidente salió con una frase que desató risas.
“Si tomo aguardiente me vuelvo guerrero”, dijo el expresidente.
