Carlos López, fue despedido por recibir dos mil pesos que el acompañante de una residente del conjunto en el que trabajaba, le ofreció para que se tomara un tinto.
Un vigilante de la empresa SG2 en Bogotá fue despedido por permitir el ingreso de la motocicleta del acompañante de una residente y recibir dos mil pesos para que se tomara un tinto el pasado 9 de febrero.
Sin embargo, el vigilante espera que se aclare la causa de su despido, ya que lo señala como injusto.
Según lo conocido, el vigilante fue despedido por dos causas: “permitir que personas ajenas a la copropiedad ingresaran y recibir dinero por el servicio de parqueo”. El vigilante niega haber cobrado por dejar ingresar la motocicleta y asegura que los dos mil pesos que recibió fueron un gesto de agradecimiento del acompañante de la mujer. Además asegura que lo hizo pensando en la seguridad de la pareja ya que era muy tarde.
Este caso ha generado controversia, ya que hay quienes apoyan al vigilante y creen que el despido fue injusto al vulnerar el derecho al debido proceso, mientras que otros apoyan la decisión de la empresa SG de despedir al vigilante por violar las políticas de seguridad de la copropiedad.
Con información de Semana