Nuevamente la capital del departamento volvió a ser escenario del terrorismo que tienen atemorizados a las familias colombianas y al sector productivo por el accionar violento de las organizaciones criminales, que se han venido fortaleciendo desde que asumió la presidencia el actual primer mandatario de los colombianos. A pesar de la arremetida de la Fuerza Pública y de las Fuerzas Militares contra estos delincuentes, se siguen ensañando contra la sociedad neivana y al sector empresarial. Habíamos descansados durante la temporada de las fiestas sampedrinas. Ayer en las horas de la madrugada lanzaron artefactos explosivos, a dos establecimientos comerciales de la ciudad, produciendo solamente daños materiales a sus fachadas. Con estos hechos intimidatorios, buscan presionar el pago de extorsiones, que tienen afectados el dinamismo económico de la región, y por ende, han convertido al Huila, en una de las regiones que presentan los más altos índices de desempleo del país.
Se realizan Consejos de Seguridad, donde se formulan estrategias para contrarrestar este accionar terrorista, se amplía el pie de fuerza del aparato armado en la región, y todavía se siguen presentando estos actos terroristas, como los ocurridos contra los establecimientos comerciales ubicados en la Carrera 7 con calle 5 y en la Carrera 5 entre calle 1G y 2: Concesionarios de motos de la marca Suzuki Moto Neiva. Estos nuevos atentados elevan a 19 establecimientos comerciales afectados por este tipo de ataques en lo que va del año, que, según las autoridades, buscan generar intimidación y presionar el pago de extorsiones conocidas como vacunas. Desde que se crearon las oficinas ilegales que desempeñan las mismas funciones de la Dian en las montañas del departamento, para exigir el pago de los impuestos de guerra, hemos sido escenario de la forma demencial e irracional de la subversión que se ha incrementado con la anuencia del gobierno nacional, por la laxitud que ha mantenido con estas organizaciones narcoterroristas en el territorio colombiano, así los áulicos del gobierno del cambio, digan lo contrario.