En Bogotá desde el próximo 26 de julio hasta el 30, se realizará en CORFERIAS el Xl Congreso Nacional de la CGT (Confederación General del Trabajo), en donde participaran alrededor de 1000 delegados de diferentes organizaciones de primero y segundo grado, afiliadas a la Confederación, lo mismo que delegados internacionales. La instalación del Xl Congreso estará a cargo de la presidenta Miryam Luz Triana en dónde se le hará un gran homenaje al formidable líder, Julio Roberto Gómez (1951…2021), quien ejerció la presidencia de la central por varios años y, además es considerado como el dirigente sindical más esclarecido de todos los tiempos en Colombia.
Precisamente este Congreso lleva el nombre de Julio Roberto Gómez Esguerra, cuyo legado ha continuado la actual presidenta de la central con la democracia sindical, que no le permite a la central obrera ser apéndice de partido político alguno, como ocurre en otras organizaciones en donde los grupos políticos son los que colocan los cuadros directivos en los sindicatos; también la CGT siempre ha mantenido su autonomía frente a gobiernos y patronos, por lo que tiene autoridad moral para la defensa sin cortapisas de los sectores de la población menos favorecidos; puesto que el carácter libertario del sindicalismo desde de sus orígenes hace 200 años en el mundo, no le permite ir a la zaga de ningún gobierno, sin importar su sello político o ideológico, ni el discurso que proclame.
En el Congreso de la central habrá temas de palpitante actualidad, para el movimiento de los trabajadores y el pueblo colombiano en general, como: La corrupción y su impacto en el desarrollo económico del país, Dialogo Social, Reforma Laboral, Pensional y de la Salud; igualmente se analizará el futuro del sindicalismo a nivel nacional de cara a las desviaciones liquidacionistas de algunos dirigentes que por su actitud gobiernera, pretenden colocar al movimiento sindical como un simple adorno del ejecutivo, negando lo que históricamente ha representado a nivel universal la lucha obrera, que no necesita de supuestos mesías, para desarrollar dialécticamente la batalla por sus reivindicaciones.
Indudablemente el Congreso Nacional estatutario de la CGT, en este mes de julio, es un acontecimiento significativo para la existencia orgánica y política de la central, por lo que tendrá que salir fortalecida, pues el suceso será un referente para los trabajadores, dado que el Congreso tendrá el compromiso de impulsar un proceso de concientización mediante las deliberaciones, garantizando la participación amplia, teniendo siempre de objetivo estratégico la Democracia Real, que es la opción de los trabajadores para su emancipación, y que es contraria a doctrinas totalitarias aparecidas muchas décadas después del surgimiento del sindicalismo, pero que han engañado con fabulas a varios pueblos del planeta, oprimiendo a las masas para que camarillas parasiten perpetuamente en la dirección de los estados, cuando conquistan el poder.
En el magno acontecimiento de la central, se manifestará la solidaridad con los pueblos de Venezuela, Nicaragua y Cuba, que sufren oprobiosas dictaduras orientadas por dogmas que desde el siglo XlX, fueron repudiados por los obreros, debido a su contenido burocrático, absolutista y estatista, pero que basados en trampas y violencia han logrado establecer dictaduras en algunos países, en atención a lo cual se considera como una ofensa a la inteligencia que existan esas tiranías en Latinoamérica.
La CGT, tiene como principio irrenunciable defender la libertad y la democracia, pues son bienes de la población, visto que hay un asedio permanente de las fuerzas totalitarias con diferentes remoquetes, cuya matriz es una doctrina absolutista que busca llevar al país a la miseria, el envilecimiento, el enajenamiento y la dictadura, que son condiciones necesarias para consolidar un régimen liberticida, por eso el Sindicalismo Democrático en cabeza de la CGT debe hacer un gran frente en contra un posible sometimiento político, que es a donde nos quiere conducir el totalitarismo, usando diferentes mecanismos para sus torvos propósitos.
Durante sus 52 años de existencia, la CGT se ha caracterizado por orientar de manera diáfana a su militancia, debido principalmente a que la central no ha caído en ninguna clase de aventurerismo, que es propio de algunas organizaciones que astutamente son manejadas como simples activos de partidos políticos, pretendiendo de manera inescrupulosa que sean un rebaño de facciones partidistas; subrayando que la lucha social no es un coto cerrado de ninguna corriente política o ideológica, sino que es un instrumento de toda la humanidad; de ahí que la CGT que practica un sindicalismo de principios y valores exalta la libertad individual, como condición suprema de la humanidad, para la realización integral de mujeres y hombres.
Desafortunadamente en CGT, hay un sector que considera al sindicalismo a manera de medio, para satisfacer apetitos individuales en el actual gobierno, ya sean políticos, económicos, burocráticos y de otra índole, lo que va en contrapelo con la esencia histórica y universal del sindicalismo que por su carácter libre, no puede caer en semejantes prácticas que contradicen el altruismo que debe tener el líder sindical; sin embargo el Xl Congreso de la CGT que comenzará el 26 de julio va a demostrar en donde está la genuina CGT, que con tanta inteligencia y dedicación construyó Julio Roberto Gómez, basado en la independencia sindical, debido a lo cual los sindicatos no deben de actuar de acuerdo al parecer de los partidos políticos, dado que ello limitaría su lucha social y quedarían como instrumentos del gobierno o de la oposición; ello sin desconocer el pluralismo que debe existir en el movimiento de los trabajadores.
Por: Ariel Peña