Para una alimentación sana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo de frutos secos, como nueces, almendras y avellanas. Dentro de sus cualidades nutricionales destacan sus aportes de grasas saludables para el organismo. Así, la Fundación Española de Nutrición (FEN) reseña que las almendras son buena fuente de proteínas, ácidos grasos monoinsaturados, ácidos grasos insaturados, fibra, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc, potasio, vitamina E, riboflavina, tiamina, niacina y folatos, lo que convierte a este fruto seco en un alimento con gran valor nutricional.
Los beneficios asociados al consumo de almendras son variados. Por ejemplo, el portal Mejor con salud menciona el aporte que estos frutos hacen al corazón. “Estudios realizados por diferentes expertos han señalado que aquellas personas que comen almendras de manera regular, es decir unas cinco veces por semana, ven disminuido el riesgo de padecer un infarto y otras enfermedades cardiovasculares”, reseña el citado portal.
Una de las cualidades más llamativas de las almendras es su aporte de ácidos grasos instaurados, los cuales contribuyen a regular los niveles de colesterol en el organismo. Vale recordar que esta sustancia puede derivar en la formación de placa en las arterias, bloqueando la circulación sanguínea. Otro beneficio de consumir almendras con frecuencia es que podría ayudar a proteger y fortalecer los huesos y dientes, un efecto que se le atribuye a partir de su contenido de calcio y fósforo, dos minerales clave para el sistema óseo.
Le puede interesar: Una buena hidratación es la clave para llevar una vida sana
En ese sentido, comer almendras podría ayudar a proteger y fortalecer los huesos y los dientes, dado su contenido de fósforo y calcio, dos minerales esenciales para la salud del aparato óseo. De hecho, la FEN resalta que una ración de 25 gramos de almendras sin cáscara aporta el 18 % de la ingesta diaria recomendada de fósforo. La sensación de saciedad que propician las almendras configura otro beneficio para la salud.
El consumo regular de este fruto puede ayudar a calmar la ansiedad por comer, lo que representa una gran herramienta a la hora de bajar de peso. Por supuesto, para potenciar los beneficios de las almendras, es conveniente acompañar su consumo por otros hábitos de vida saludable, como una dieta balanceada y actividad física regular.
Precisamente, uno de los frutos secos más populares es la almendra. De acuerdo con el portal especializado Mejor con salud, por sí solo, comer un puñado de almendras al día no hace que la salud se mantenga óptima en todo momento. Sin embargo, sí se configura como un hábito con el potencial para ayudar a las personas a mantener una dieta más saludable.
Bajo esa lógica, explica que elegir un puñado de almendras naturales en lugar de una bolsa de fritos o golosinas es mucho más beneficioso para la salud, pues se reduce ampliamente el riesgo de desarrollar sobrepeso y obesidad. Por supuesto, es importante complementar con otros hábitos de vida saludable, como la actividad física y el descanso adecuado.