En un 25% disminuyeron las ventas para el sector de entretenimiento nocturno durante la época decembrina. Lo anterior, en comparación con el año 2021 donde se registraron ventas de $8 mil millones. El panorama que no resultó ser positivo dejó con incertidumbre a los comerciantes, toda vez que, en este primer trimestre del año cerca del 5% de los establecimientos tendrá que cerrar sus puertas.
DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO
Por: Johan Eduardo Rojas López
Fotografías: Felipe Poloche
Hasta última hora el gremio de entretenimiento nocturno guardó las esperanzas de cumplir sus expectativas de ventas durante la época decembrina que normalmente es prometedora, sin embargo, se registró una notable disminución que podría generar afectaciones adicionales a los comerciantes, llegando al punto incluso de cerrar sus establecimientos. Aunque esta Casa Editorial ya había anunciado la situación, realmente se esperaba que, para mediados de enero se tuviera un panorama estable.
Fabio Antonio Guzmán Tafur, presidente de la Asociación de Bares, Restaurantes y Discotecas, Asobares para el Huila, aseguró que, el sector durante el último trimestre, es decir, octubre, noviembre y diciembre, donde se esperaba un gran movimiento, ya daba visos de la poca reacción que se tuvo frente al 2021. Es más, las cifras que se tuvieron del año 2022 estuvieron por debajo del año 2019
“Teníamos las expectativas de poder mejorar esos datos, es que ningunas de las fechas que se celebran durante estos meses como amor y amistad, Halloween, grados, navidad y año nuevo, lograron superar lo del año anterior. Diciembre inicio regular y esperábamos que la temporada del 24 de diciembre hasta el 10 de enero pudiera mejorar la situación, pero no resultó así por varios factores entre esos la variación climática, la inflación, le fecha en la que cayeron las fechas especiales y las fiestas en las empresas que se realizan por temporada”, aseguró Guzmán Tafur.
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Afectaciones
Para el presidente de Asobares, las lluvias impidieron que los ciudadanos salieran a disfrutar de la temporada, pues estas condiciones climáticas hicieron que mucho se contrajeron y, por eso, se ha convertido en un gran ‘dolor de cabeza’ para todos los sectores.
Anudado a eso, el cierre del PIB del 2022 que se ubicó en 13,12% ha sido casi ‘mortal’ para el sector, pues ellos aumentaron precios de su portafolio hace un año, sin embargo, por el mismo movimiento económico y el año tan volátil que se vivió a causa del ejercicio político, creció la incertidumbre que generó el decrecimiento de la demanda. En ese sentido, aumentaron el número de establecimientos, pero la demanda cada vez disminuía.
Detalló así que, “cerramos el año con que la inflación subió todos los precios, entre esos, los del servicio público y arriendos, sumado a todos los elementos para poder producir nuestros productos. Y nosotros no podemos subirle más a la carta. Entonces en el ejercicio de costo de inflación, menor venta, pues la utilidad bruta cae”.
Los días en los que cayeron las fechas importantes, además, también contribuyó en el panorama negativo que hoy se entrega, pues esto generó que se perdieran dos festivos que podrían convertirse en un puente largo, lo cual, hizo que mucha gente no se interesara en viajar. En ese orden de ideas, si se hubiera tenido un puente largo los ciudadanos se alentaban a viajar y se incrementa la demanda. Finalmente, como si fuera poco, las fiestas empresariales le han quitado clientes al sector porque los propios no se interesan por visitar los establecimientos, sino que se quedan en sus casas u oficina.
Una considerable disminución
Debido a esto es que se entrega un balance poco alentador en donde se evidencia una baja del 25% en las ventas respecto al año 2021 y, por eso, arrancan el 2023 con incertidumbre que deja el costo de vida. Durante el año 2021 se tuvieron unas ventas de aproximadamente $8 mil millones, pero se cayeron aproximadamente $2 mil millones en las ventas, lo que significa que, en el 2022 se movieron durante esta época aproximadamente $6 mil millones. Claramente se esperaba que aumentara, pero no fue así, pues no se logró ni siquiera llegar a las cifras del 2019, es decir, $6.500 millones.
La cara positiva de la temporada
Gracias a las líneas específicas en las que se enfocaron con los 542 establecimientos de venta de licor registrados ante la Cámara de Comercio durante el mes de diciembre, se logró controlar la incidencia del licor adulterado y contrabando en el Huila.
“Hubo coordinación con la administración departamental, municipal y la Policía Nacional, quienes hicimos operativos frecuentes para tener un balance positivo en ese sentido. En el Huila no se reportaron casos significativos en incautación o venta de licor adulterado, en eso creo que estamos en un buen porcentaje frente a otros departamentos, sin embargo, siempre antes de las fiestas mandamos la alerta. Además, en la situación de orden público tuvimos una estabilidad y no se presentaron hecho por lamentar relacionados con nuestros establecimientos y es porque nos hemos unido con gremio para realizar un frente de seguridad, por eso, actuamos mucho más rápido”, expuso el comerciante
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La resistencia los caracteriza
No obstante, esto no son ‘penas’ para el sector pues se caracterizan por ser resilientes y desde ya analizan el panorama que se tendría para este primer trimestre del año, el cual ven con preocupación, pero también con esperanza.
Así lo afirmó Guzmán Tafur, quien argumentó que, “venimos de una pandemia que nos dio muy duro y nos mantuvimos, hemos liderado un proceso de económica y empleabilidad. Somos positivos y aguerridos, pero sí nos preocupa que en lo corrido del año pasado y lo que vamos del 2023 desde el punto de vista económico no vemos mayores luces para poder tener tranquilidad en asuntos que nos competen. Nosotros estamos en una preocupación de lo que se viene en enero y febrero porque al no haber tenido las ventas para la temporada con utilidades pues obviamente las inversiones a los establecimientos, el tema de la empleabilidad va a bajar y muchos están pensando en recortar la nómina”.
El San Pedro a la vuelta de la esquina
El líder gremial aplaudió el lanzamiento de la temporada típica del Huila durante diciembre del año pasado. Esto en razón de que les da tiempo para aportar en la consolidación del festival y, por ende, esperan que en estos meses puedan entre todos planificar muy bien este magno evento con el que se despedirán el alcalde de Neiva, Gorky Muñoz Calderón y el gobernador del Huila, Luis Enrique Dussán.
Es así como esperan que se la ‘jueguen’ toda durante este año que viene, según el sector, con tanta dificultad y puede generar que muchos quiebren, e incluso, ni siquiera alcancen a llegar a San Pedro porque la temporada decembrina no les permitió dejar un ‘colchón’ de dinero para poder mantenerse durante enero, febrero y mediados de marzo.
Sostuvo que, “de aquí marzo creemos que de aquí a marzo es muy probable que puedan cerrarse un 5% de los establecimientos porque ya han anunciado algunos este tema por efectos del incremento de arriendo y nómina. Es decir, se podrían estar perdiendo unos 250 empleos”.
Estancos sin mejoras
Nuevamente Diario Del Huila, realizó un recorrido por algunos estancos de la ciudad de Neiva, quienes indicaron que efectivamente no se cumplieron las expectativas y las ventas disminuyeron.
María Constanza Escobar Rivera, administradora de una cigarrería, comentó que, “No se lograron las expectativas porque se dio mucho la baja en ventas. Es decir, se vendió bien, pero no como los años anteriores y uno suerte según las vigencias anteriores y este año nos quedó mucho surtido”.
La disminución fue de aproximadamente un 20% y lo que más se vendió fue la cerveza a pesar de que estaba costosa, empero, no salió el aguardiente y el whisky que normalmente se mueve durante esta época, lo que significa que, las sorpresas fueron absolutas. Ahora en varios sectores esperan el ingreso de los jóvenes universitarios para que se reactive un poco la dinámica.
“Las ventas estuvieron malas, se bajaron casi el 50%. Pensé que para fin de año todo iba a estar mejor, pero todo igual, muy solo. Todo quedó mal, no se cumplieron las expectativas. Lo bueno es que el trago viene con fechas largas de vencimiento y lo importante es que no se va a poder”, concluyó Ronald Lozano, administrador de otra cigarrería de Neiva.
