Cada vez son más frecuentes los ataques o afectaciones al personal sanitario, el año pasado hasta el mes de noviembre se habían presentado 271 en el Huila. La mayoría ocurren en el servicio de urgencias por el desconocimiento del sistema de atención.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Por: Johan Eduardo Rojas López
Frente a esto Diego Fernando González, secretario de la Junta Directiva del Colegio Médico del Huila, dijo que, estas agresiones hacia el personal de la salud no son algo nuevo y obedece a la falta de cultura por parte de los ciudadanos, quienes frente al desconocimiento del funcionamiento del sistema se alteran.
“La mayoría de estas agresiones son originadas de pronto en el no entendimiento de la dinámica del sistema de urgencias, el cual, opera con base en una clasificación del triaje, es decir, que se atiende primero a los pacientes que tienen una patología que compromete mayormente su vida más no por orden de llegada como quiere la gran mayoría de las personas. Este desconocimiento hace que muchos agredan al personal de salud”, aseguró.
Lo anterior ha sido denunciado ante las entidades competentes y la opinión pública en diversas oportunidades, sin embargo, se sigue presentando en todos los rincones del país y obviamente el Huila no es la excepción.
De hecho, hace poco se registró la primera situación en el municipio de Hobo de agresión al personal médico en donde afortunadamente no hubo lesiones personales severas, pero sí avivó esta problemática de la que poco se habla, pero está vigente.
Según Diego Fernando González, se conoce que eventualmente se evidencian un par de casos al año y aunque la cifra no es alarmante, la realidad es que muchos no denuncian y diariamente se ven expuesto a agresiones de toda índole. No obstante, se invita a denunciar y constantemente se realiza el seguimiento a este tipo de casos.
Explicó así que, “en todos los escenarios se plantean dos circunstancias, primero por parte del personal de salud para que denuncie este tipo de agresiones, pero, por otro lado, también invitar a la ciudadanía en que si tienen algún problema, inconveniente, algunas insatisfacción con el servicio, que acudan a los canales legales de denuncias, quejas y reclamos, que cada una de las IPS tiene para recibir las quejas de los usuarios y hacer el trámite pertinente”.
Te puede interesar: Al menos el 80% de los comerciantes en el Huila acceden al ‘gota a gota’
Ataques verbales y físicos
Y es que el personal de salud ha tenido que lidiar con ataques tanto verbales como físicos, es decir, desde el insulto hasta los golpes. Es importante aclarar que esta situación no solamente se presenta en contra del personal humano, sino que también, se realizan afectaciones a las instalaciones y elementos propios de los centros de salud como las ambulancias, lo cual, se configura como agresión a la misionalidad médica.
Falta de cultura
Para el secretario de la Junta Directiva del Colegio Médico del Huila, esto es algo arraigado en la cultura agresiva de las personas. “Luchar en contra de esto no es fácil porque se trata de una cuestión cultural”.
Lamentablemente, “Colombia es un país particularmente violento y los niveles de cultura de la población son bajos, entonces nos agredimos entre nosotros y el personal médico no es ajeno a eso; ojalá la gente tuviera conciencia del papel que tenemos. Esa situación se puede combatir mediante el mejoramiento de la educación en la gente, de lo contrario, no hay otra forma de mejorar esos indicadores”, agregó.
De allí la importancia de educar a los ciudadanos para que entiendan el papel del médico y el funcionamiento del sistema de salud para lograr ser pacientes porque esta situación ha generado que el personal médico desista de su interés de trabajar en estas instituciones y decidan renunciar. Aclaró para finalizar que, la mayoría de los casos no son ocurren a la negligencia médica realmente, sino porque les niegan o demoran los servicios.
Fallas en la ruta de agresiones contra la misión médica
De acuerdo con lo señalado por la concejala Lourdes Paola Mateus Serrano, los ataques contra la misión médica también son producto de una inconformidad que la ciudadanía tiene frente al ‘perverso’ sistema de salud y tristemente el personal de salud es quien pone la cara.
“Eso evidentemente desencadena violencia en todos los centros de atención, a pesar de que, no es el personal médico el encargado de que el sistema de salud fluya. Por otro lado, hay que recordarle a la gente que hay una ruta de agresiones contra la misión médica, lo cual, se considera un delito internacional que en Colombia está reconocido desde el año 2002, pero no ha tenido la afectividad suficiente porque las secretarías de Salud encargadas de la recolección de estas estadísticas y tomar las medidas necesarias, muchas veces desconocen incluso la existencia de esta ruta”, explicó la cabildante.
Bajo esa lógica, en medio de la discusión de la Reforma a la Salud, se busca que se reconozcan las agresiones contra el personal médico como un delito dentro del país, sin necesidad de que se tenga que acudir al derecho internacional humanitario dado que actualmente esa ruta no está tipificada como un delito en el Código Penal Colombiano.
Poblaciones más agredidas
Es propio indicar que, aunque no hay estadística exacta precisamente porque la ruta no funciona, resulta complejo establecer las poblaciones más agredidas, empero, para la concejala, a pesar de que, “son absolutamente comunes las agresiones de todo tipo que recibe el personal de salud en su acontecer diario, hay que recordar que ahí hay un personal muy feminizado que es el que atiende en primer medida los pacientes, entonces, pese a que no tengo un dato exacto es probable que sea este personal el que recibe de primera mano las principales agresiones”.
Lee también: 32 procesos disciplinarios se adelantan en contra de funcionarios de las registradurías del Huila
Para ella la pandemia desnudó el problema estructural que hay en el sistema de salud, el cual, tristemente es ‘atendido’ por el personal médico, por eso, el sentir es de impotencia frente a la manera en la que se menosprecia al personal que arriesga su vida para salvar la de otros. “Este reconocimiento de que son héroes y heroínas debe superar el discurso y materializarse en garantizar el respeto al personal que atiende los servicios de salud y al reconocimiento efectivo de los derechos laborales que están precarizados en todo el sector”, concluyó Mateus Serrano.
¿Esto es un delito?
Diario Del Huila, dialogó con el abogado Alfredo Vargas Ortiz, quien arrancó afirmando que, la Asociación Colombia de Hospitales hace algunos años realizó una investigación en donde precisamente se le preguntaba al personal médico si habían sido víctimas de agresión y en esa encuesta se tuvo como resultado que el 15% de los funcionarios que realizan estas actividades de carácter sanitario habían sido agredidos, de esos, el 40% eran enfermeras y el 25% eran médicos generales.
“Esto es muy importante por una razón y es porque estas personas están prestando un servicio a la sociedad y es muy especial, lo cual muestra en últimas que como ciudadanos nosotros tenemos unos deberes que están consagrados en la Constitución Política de 1991 concretamente en el artículo 95 que establece el deber de respeto de los derechos de las demás personas”, informó.
Añadió entonces que, en ese sentido, incluso la ley 100 ha establecido en su artículo 160 la necesidad de que los pacientes traten con dignidad y respeto a los prestadores del servicio. De la misma forma el Ministerio de Salud mediante resolución 43 del 2011 y la propia ley estatutaria 1751 del 2015 establecen el deber que tienen los pacientes de respetar a estas personas.
Recientemente salió una guía para la promoción y protección de las agresiones al personal de salud, en donde se insiste en la necesidad de que se tomen medidas de carácter policivo porque el Código Nacional de Policía ha establecido en el artículo 156 y 150 que una persona que se encuentre en ese grado de excitación y esté agrediendo al personal sanitario puede ser retirado del sitio o los pueden multar hasta por ocho salarios mínimos de acuerdo a lo que señala la ley 1806 del 2016 articulo 27.
“Además, se señala que la EPS puede reportar el comportamiento violento y con base en eso, en un determinado momento puede incluso sancionar suspendiendo el servicio, algo discutible porque las personas tienen el derecho al acceso a la salud”, determinó el abogado.
