Pocos días atrás la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas realizó un mapeo en el Cementerio Central de Neiva con el que se busca identificar los sitios de interés forense para intervenir. Esto sería un avance significativo para las víctimas que venían solicitando una intervención en el camposanto dado que, al parecer, allí reposan muchos restos óseos de desaparecidos.
DIARIO DEL HUILA, CIUDAD
Por: Johan Eduardo Rojas López
Esmith Duarte Cano, secretaría de Paz y Derechos Humanos del municipio, señaló que, la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas inició este trabajo sobre el Cementerio Central de Neiva para dar con el posible paradero de restos inhumados que correspondan a personas desaparecidas en el marco del conflicto armado y de los falsos positivos. Lo anterior, en atención a las solicitudes de las familias víctimas de este flagelo.
Esta acción que arrancaron en el mes de febrero se prolongará, al parecer, durante un largo tiempo, pues la realización de la labor completa podría tardar un poco más de un año. “Iniciaron con una caracterización, sin embargo, existen otras etapas que ellos manejan con sus equipos técnicos y especializados. La Alcaldía Municipal brinda el acompañamiento a las víctimas del conflicto armado y también se articula con la Unidad de Búsqueda, las organizaciones de víctimas y demás institucionalidad para permitir y facilitar el trabajo que se viene desarrollando en el cementerio central de Neiva”, explicó la jefe de cartera.
Unos avances que alivianan el dolor de décadas
Para ella estos procesos requieren de unos pasos que se han venido marcando durante el último tiempo. La apertura de las medidas cautelares, el fallo emitido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos y esta intervención sobre el camposanto, son definitivamente acciones muy importantes porque son unos pasos ayudarán a alivianar algunas familias que se han enfrentado de frente y con crudeza a este flagelo y aún hoy desconocen qué pasó y dónde están sus seres queridos.
Es así como también atiende a las víctimas y sus solicitudes, dándoles la importancia que se merecen en aras de poder aclarar de alguna manera la situación que lo carga de dolor durante tantos años.
Según la secretaria de Paz y Derechos Humanos del municipio, esto ayudará significativamente a las víctimas del conflicto armado que padecen esta dolencia y la han padecido durante muchísimos años, e incluso décadas. Básicamente un dolor que ha embargado a generaciones enteras dado que ese sentimiento pasa de quienes iniciaron la búsqueda a sus hijos, sobrinos y demás descendientes.
Te puede interesar: Restricción de parrillero volvería a regir en el microcentro de Neiva
La intención visibilizar este flagelo, es que nunca más se vuelva a repetir en ningún rincón del país y el mundo. Aseguró que, “Este trabajo de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, está en la primera fase que es la de la caracterización y aquí lo que ellos estás haciendo con todo un equipo especializado, básicamente es identificar las posibles ubicaciones de los restos humanos, no solo el Monumento 14, sino de todo lo que encontremos en el cementerio central”.
A la fecha se desconoce la manera de operar que se tendrá y las actividades que se desarrollarán, toda vez que, solamente después de un informe que entregarán se determinará lo que vendrá. Se espera entonces, por parte de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas el respectivo informe que están consolidando para posteriormente hablar de acciones certeras.
A la espera del informe
“Los insumos que aporta esta caracterización y visita que ellos hicieron durante los días 1, 2, 3, 4 y 5 de febrero, les permitirá diseñar a ellos la ruta. Todo ese levantamiento de datos e información que hicieron durante estos días lo utilizarán para lo que viene. Una vez definidos los pasos a seguir, nosotros lo que hacemos como municipio es articular y estar atentos a facilitar todo el trabajo, igual que con otras instituciones”, afirmó.
Dejó claro también que, no se tienen cifras claras de los cuerpos inhumados que podrían encontrarse en dicho lugar debido a que no hay un registro exacto y esa falta de documentación de los mismos es lo que precisamente tiene trabajando a todas las intuiciones, sin embargo, al hablarse de diversos tipos de casos resulta aún más complejo.
Y es que Neiva no solo ayuda a la búsqueda, sino que, hay unas posibles cifras de la capital departamental y otras de toda la región, por lo cual, lo que sí se sabe es que alrededor de 200 personas se encuentran allí inhumadas sin identificar.
Bajo esa lógica, todo resulta siendo especulación frente a la operatividad, en donde incluso se ha hablado de cerrar completamente el cementerio central para poder intervenir. Ante esto, Duarte Cano, detalló que, “tendríamos que esperar los informes, no obstante, nosotros tampoco queremos generar pánico de que no se vaya a utilizar más el cementerio porque esto no es cierto en el momento. El cementerio sigue trabajando exactamente igual y una vez tengamos el informe y además el pronunciamiento de la Jurisdicción Especial para la Paz, se definirá cómo se trabajará en el camposanto”.
Por lo pronto, en el momento, insiste en la importancia de esta primera fase que reivindica un poco todo el tiempo de lucha que ha tenido que dar las víctimas, quienes apenas hasta ahora están siendo escuchadas y por fin se reconoce que este flagelo se dio en territorio.
Contexto
Paola Medina Charry, coordinadora en el Huila de la Corporación Reiniciar, por su parte, enfatizó que, aún no se ha hecho una intervención específicamente, pues se realizó una introspección no invasiva en atención a unas inconsistencias descubiertas.
Para contextualizar explicó que, en el año 2020 la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) inició el estudio de medidas cautelares sobre el cementerio central de Neiva, capital de Huila, en el suroccidente colombiano. El proceso dio inicio cuando el jefe de la Oficina de Derechos Humanos de la Alcaldía de Neiva puso en conocimiento de la JEP la existencia de una gran cantidad de cuerpos inhumados sin identificación en fechas que corresponden “con las épocas recientes más álgidas del conflicto armado”.
Lee también: El mototaxismo: “una actividad permeada por la mafia”
Posteriormente, en el 2021 la Sección de Ausencia de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) decretó medidas cautelares por un año en el Cementerio Central de Neiva, que está bajo la administración de la Parroquia de la Inmaculada Concepción desde 1883, para proteger los cuerpos que podrían corresponder a víctimas de desaparición forzada del conflicto armado. La decisión se tomó luego de una audiencia pública que hubo en Neiva.
Esas medidas se levantaron en mayo del año en curso básicamente porque no existía riesgo de traslado del camposanto, sin embargo, seguidamente la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), reabrió la medida, en relación con los derechos a la verdad y memoria de las familias víctimas de desaparición forzada, en particular, de Tarcisio Medina Charry y Albeiro Ordoñez Rojas.
Entre las dudas
De acuerdo con Medina Charry, la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas debido a muchas insistencias que empezaron a descubrirse frente a los informes que pasaban las distintas entidades a la Jurisdicción Especial para la Paz, decidieron ingresar al cementerio central de Neiva para hacer una introspección no invasiva, es decir, verificar la información que ya habían hecho otras unidades estatales, pero que dejaban dudas.
“La idea es tener certeza de alguna información que había sido entregada. Además, realizan otro trabajo donde identifican que hay otras zonas en tierra donde han sido depositados cuerpos que figuran como desaparecidos y están en el mismo lugar con los cuerpos identificados no reclamados”, indicó.
Agregó entonces que, no se puede hablar de que hay un proceso para intervenir el cementerio central en este momento o, por lo menos, los familiares no han sido informados de algunas fechas específicas para tal fin y mucho menos de quien realiza esa función.
“Es un trabajo inmenso y muy grande, nos toca seguir esperando a ver qué cosas salen de allí. Se necesita que se investigue el interior del cementerio central de Neiva para conocer por qué se aceptaban que estas víctimas del conflicto armado hubiesen muerto o no en combate, fueran traídas hasta allí a altas horas de la noche y eran permitido que se enterraran allí sin su debida marcación. Nosotros las víctimas creemos firmemente que parte de la historia de la desaparición forzada en el Huila está enterrada en ese cementerio central de Neiva y hace parte de ese proceso que necesitamos conocer”, concluyó.
Finalmente, es importante recordar que en ediciones pasadas Andrea Jiménez, directora del Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos, Paz y Territorio (OBSURDH), se había referido el tema, diciendo que, una de las solicitudes que las organizaciones están haciendo a la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas, radicaba en que se realice una intervención total en el camposanto, lo que implicaría que sea cerrado y se haga una caracterización de todos los cuerpos que sean inhumados.