«Estamos viendo lo que le ocurrirá a la Tierra», afirmaron los investigadores estadounidenses que evidenciaron, por primera vez, la forma en la que una estrella a punto de perecer “devora” a un planeta.
Por: Angélica Andrade
Los investigadores manifestaron que lo evidenciado puede llegar a ser lo mismo que ocurra con el sol y la Tierra en aproximadamente 5.000 millones de años, toda vez que tienen muy claro lo que ocurre cuando una estrella se avecina al final de su existencia.
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Para lo mencionado, se apoyan a través de una invaluable cantidad de sospechas, razón por la que han inferido que puede llegar a propagarse hasta cientos o miles de ciclos su dimensión original y devorar a los planetas que transitan a su alrededor. No obstante, hasta el momento jamás se había podido lograr una prueba directa y nunca habían captado un fenómeno similar, hasta que lo logró un equipo de preparados científicos de Estados Unidos, alcanzado y terminado de publicar en la revista Nature, cuyo mensaje es contundente, desafiante y retador: “Estamos viendo el futuro de la Tierra”.
Lo anterior se describe, en conceptos de Kishalay De, investigador, docente y teórico del Massachusetts Institute of Technology, MIT, y autor principal de la obra. Es de precisar, que en el análisis se describe un fenómeno descubierto en la propia galaxia, la Vía Láctea, a aproximadamente 13.000 años luz de distancia, contigua a la constelación Aquila, o el Águila, donde una estrella se transformó en 100 oportunidades más brillante en solo diez días previos al desvanecimiento, formulando una señal fría y perdurable. Finalmente, después de bastantes observaciones, los estudiosos han hallado una única definición: “era una estrella moribunda, que al quedarse sin combustible y expandirse se tragó un planeta cercano. Ocurrirá lo mismo en nuestro Sistema Solar dentro de 5.000 millones de años, cuando el Sol agonice se hinchará y se llevará por delante a Mercurio, Venus y nuestro planeta”, aseveró uno de los investigadores.