Los chats, las imágenes sugerentes e incluso el mercado negro son formas en las que se vende contenido sexual en las redes sociales.
Estos creadores de contenido erótico utilizan principalmente sitios como Onlyfans, Manyvids y MyM Fans, pero para atraer espectadores, es importante llamar la atención en Facebook, Twitter, Instagram y TikTok, que son populares entre niños y adultos.
La dinámica, según el análisis, se basa en publicar fotos obscenas o incluso desnudos en Twitter, la única red de este tipo que lo permite. Se incluye un enlace que apunta a la plataforma que aloja el contenido. Se requiere una cuota de suscripción mensual de entre 4,99 y 50 dólares ($23,000 y $230,000) para este servicio.
El valor de la suscripción de cada creador de contenido se basa principalmente en la cantidad de suscriptores y el uso de las fotos y videos que se almacenan en estas plataformas.
Pero dado que estas plataformas retienen el 20% o el 30% de cada suscripción, esta no es la única forma de hacer ventas. Algunas personas deciden comercializarse y vender los productos que fabrican.
Lo logran empleando la misma técnica de marketing que aquellos que promocionan Onlyfans y sitios web similares. Pero en este caso suelen proporcionar un número de contacto donde se especifican las condiciones de compra, casi siempre con tarifas fijas y no negociables, o acceder a un grupo en Telegram que actúa como filtro para el envío de fotos y vídeos sin limitaciones.
No hay un estándar en esta situación, pero cada creador establece un valor basado en lo que cree que es importante. Se pueden encontrar desde $ 25,000 hasta $ 100,000 para ellos. Independientemente de la plataforma, algunos creadores afirman que la comercialización de este contenido sexual es tan lucrativa como el trabajo que realiza y la reputación que genera.
Hay casos como el de la bumanguesa Aida Cortés, que vende su contenido a 30 dólares (137.000 dólares) y tiene 128.600 suscriptores en su cuenta de Onlyfans. Además de las celebridades, cientos de jóvenes, estudiantes y profesionales buscan esta alternativa para ganar dinero extra o para resolver sus problemas financieros.
Según los informes, hay 400 productores de contenido de Colombia en Onlyfans, aunque no todos son de naturaleza sexual. Además de otros. Aunque ninguna organización tiene estadísticas oficiales, algunos expertos en el comercio de este tipo de imágenes sexuales señalan que hay unas 2.000 personas en Medellín que se ganan la vida de esta manera, y hay rumores de que hay unas 10.000 personas haciéndolo a nivel nacional.
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En cuanto a los que se especializan en marketing a través de Telegram, WhatsApp o los chats privados de Facebook e Instagram, no tienen una cuenta precisa porque estas aplicaciones no saben el monto porque sus servicios de mensajería están encriptados y se utilizan para toda clase de información.
Debido a su carácter informal y a que se basa en la publicidad y venta directa del contenido, no existe ningún organismo que lo regule o le dé seguimiento. Independientemente del método empleado, los ingresos de una persona normal que emprende esta aventura pueden, en un buen día, llegar hasta los 2 millones de dólares diarios.
El material sexualmente explícito ahora se compra y distribuye en un mercado negro además de distribuirse a través de redes.
Las personas buscan hombres o mujeres en grupos, principalmente en Telegram, según sus preferencias sexuales y la foto que usan para promocionarse.
Los montos que se manejan en este mercado son especulativos y varían de acuerdo a las características del potencial comprador y su precio de suscripción típico. Los precios son más bajos, por supuesto, y siempre solicitan recibos de pago antes de compartir las imágenes y videos, al igual que con quienes producen su contenido y lo venden de forma privada.
