Explican los científicos que la ansiedad y la depresión en las personas pueden verse afectadas de manera distinta por el cambio climático. Esta relación ha sido objeto de estudio y confirmación mediante investigaciones que analizan el impacto en individuos que padecen ansiedad o depresión.
Es relevante señalar que la Organización Meteorológica Mundial ha corroborado que julio de 2023 se considera el mes más caluroso registrado. Además, a principios de ese mes, se confirmó lo que los científicos habían advertido desde el inicio del año: la aparición del fenómeno del El Niño, exacerbando las altas temperaturas en diversas partes del mundo.
Joshua Wortzel, presidente del comité sobre cambio climático y salud mental de la Asociación Estadounidense de Psiquiatras, mencionó a The New York Times que la relación entre la salud mental y el cambio climático comenzó a ser tomada en serio hace menos de cinco años.
En este contexto, artículos académicos han expresado sus perspectivas sobre estos hechos, como lo hizo la revista académica PNAS. En sus hallazgos, se pueden evidenciar las consecuencias negativas en la salud mental de la exposición a condiciones climáticas extremas, tanto a corto como a largo plazo.
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Estos hallazgos se basan en datos meteorológicos y climáticos que utilizaron 2 millones de muestras de residentes de EE. UU., demostrando que una temperatura de 30 grados aumenta la probabilidad de problemas de salud mental en un 0.5%.
De manera similar, la revista JAMA expone que ha habido un aumento en la asistencia a salas de urgencias debido a problemas de salud mental, como trastornos por consumo de sustancias, ansiedad, estrés y esquizofrenia.
Otro artículo publicado en la revista Nature menciona un incremento en los suicidios relacionados con el cambio climático en países como Estados Unidos y México. Pronostica un agravamiento de las condiciones climáticas para el 2050.
Los científicos han estimado que el riesgo de muerte aumenta en un 5% en pacientes con psicosis, demencia o consumo de sustancias. Además, informaron un aumento del 0.7% en los suicidios relacionados con el cambio climático y un aumento del 4-6% en la violencia interpersonal, incluyendo homicidios.
Diversos factores también influyen de manera significativa, incluyendo trastornos del sueño derivados del cambio climático y el incremento en los niveles de serotonina, un neurotransmisor ligado al estado de ánimo.
El psiquiatra Asim Sah mencionó a The New York Times que el aumento en la luz solar puede intensificar los niveles de serotonina y provocar cambios en el estado de ánimo y la agresión. Además, varios medicamentos ampliamente usados, como antibióticos, bloqueadores beta, ciertos antidepresivos y antihistamínicos, también afectan la capacidad del cuerpo para detectar y regular la temperatura corporal. Por ello, Sah resalta la importancia de que los profesionales médicos evalúen los posibles riesgos para los pacientes que consumen estos medicamentos.
Otros factores, como los económicos y sociales, también inciden en la salud mental de las personas en medio de cambios climáticos. El año pasado, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático alertó que el aumento de las temperaturas, la escasez de alimentos y los problemas económicos y sociales pueden provocar ansiedad, dolor y episodios de estrés.
