Las comunidades abandonaron la audiencia en Tello. A pesar de la masiva asistencia, luego del llamado de Victor Ecue, líder indígena, a demostrar su rechazo a la solicitud por parte de Parex para explorar y posiblemente extraer petróleo en zonas rurales de Neiva, Tello y Villavieja levántandose de la silla, el recinto quedó casi vacío.
DIARIO DEL HUILA, PRIMER PLANO
Por: Gustavo Patiño
En una audiencia celebrada en el polideportivo del municipio de Tello, líderes indígenas, campesinos y líderes políticos expresaron su contundente rechazo a la solicitud de licencia ambiental presentada por la multinacional Parex Resources ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales – ANLA. El evento se transformó en una manifestación de resistencia popular tras la emotiva intervención de Víctor Ecue, representante de las comunidades indígenas del municipio de Tello y el departamento del Huila.
«No a la petrolera»
Víctor Ecue, intervino en la audiencia luego de que la representante a la cámara Leyla Rincón, además de líderes comunitarios, campesinos y políticos que expusieron sus preocupaciones frente a la posible aprobación del proyecto de exploración y extracción de petróleo por parte de Parex. En su intervención, Ecue fue directo, apelando a la solidaridad entre las comunidades no solo de Tello, sino de todo el departamento del Huila.
La representante a la Cámara por el Huila, señaló la información entregada por la CAM, en donde se señala que la zona de influencia del proyecto hay una traslapación con zonas de cuidado de afluentes y que, además, según la autoridad ambiental del Huila, en el informe de impacto ambiental se habrían omitido afluentes que pudieran salir afectados con la intervención del proyecto.
Defender el territorio
Con un saludo de «hermandad de resistencia», Ecue señaló que no era la primera vez que se encontraban en la lucha para defender el territorio de la intervención petrolera. Con voz firme, hizo un llamado a la unión de todas las comunidades del Huila y del país, afirmando que, si se permitía la explotación en un municipio, las empresas buscarían instalarse en otros. “Esto no solo es por Tello, es por todo el departamento del Huila y por Colombia. Si le decimos no a la petrolera aquí, ellos buscarán otro lugar, y por eso tenemos que decir no en todo el territorio,” expresó.
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El mensaje fue contundente y logró captar la atención de la mayoría de los asistentes. Haciendo un llamado a la claridad y a no perder más tiempo, Ecue subrayó que la decisión de las comunidades ya había sido tomada: un rotundo «no» a la petrolera. En un momento crítico de su intervención, declaró: “Si le vamos a decir no a la petrolera, pues parémonos de la silla y nos vamos porque eso es lo que venimos a decir: NO.”
Lo sorprendente fue la reacción de la audiencia. Aproximadamente el 90% de los asistentes, entre líderes comunitarios y habitantes locales, se levantaron de sus asientos y abandonaron el recinto, mostrando de manera simbólica su rechazo al proyecto de Parex. La escena dejó en claro que la oposición al proyecto no solo es fuerte, sino que está profundamente arraigada en las comunidades locales.
Las solicitudes de Parex
En el centro de la controversia se encuentran las solicitudes específicas que Parex ha presentado como parte de su licencia ambiental para el proyecto de desarrollo petrolero en el área VSM 37, que abarca un total de 11.575 hectáreas en los municipios de Neiva, Tello y Villavieja, entre otras veredas del departamento del Huila. La empresa busca permiso para una serie de actividades que han despertado inquietudes entre las comunidades locales, incluyendo la construcción de vías, plataformas de producción, concesión de aguas, y la disposición de residuos, entre otros.
Parex ha solicitado concesión de agua superficial para 14 puntos de captación en los ríos Magdalena y Fortalecillas, con un caudal total de hasta 10 litros por segundo en algunos puntos del río Magdalena, y 6,7 litros por segundo en otros puntos del río Fortalecillas, la quebrada Bateas y el río Villavieja. Además, busca explorar aguas subterráneas mediante la perforación de seis pozos profundos y la concesión para cinco pozos adicionales, con un caudal máximo de 3 litros por segundo por pozo.
Construcción de vías
Otra de las solicitudes destacadas de la empresa es la construcción de vías nuevas y la adecuación de vías existentes. Parex planea construir hasta 200 kilómetros de vías para acceder a las plataformas de producción, solicitando también la construcción de 15 plataformas, con un área máxima de siete hectáreas cada una. Estas plataformas, según la empresa, serán necesarias para facilitar las operaciones de producción y almacenamiento de petróleo.
Entre las alternativas propuestas, Parex menciona la posibilidad de ampliar tres de las plataformas existentes, así como la construcción de facilidades centrales de producción. Además, la empresa busca instalar hasta 300 kilómetros de líneas de flujo para la recolección y distribución de fluidos, así como la construcción de líneas eléctricas de alta, media y baja tensión para conectar las plataformas. Estas líneas eléctricas incluirían la posibilidad de utilizar energía solar fotovoltaica para reducir el impacto ambiental.
La oposición de las comunidades
Las solicitudes de Parex han sido recibidas con preocupación por las comunidades locales, particularmente en lo que respecta al uso del agua y al posible impacto ambiental. Durante la audiencia, varios líderes campesinos expresaron su temor de que la extracción de agua superficial y subterránea afecte los recursos hídricos locales, poniendo en riesgo la disponibilidad de agua para el consumo humano y agrícola.
Además del uso del agua, la construcción de vías y plataformas en áreas rurales y zonas de reserva natural ha generado inquietudes sobre el impacto que esto podría tener en el ecosistema local. Las comunidades temen que la deforestación y el movimiento de tierras necesarios para la construcción de vías y plataformas contribuyan a la degradación del medio ambiente y a la pérdida de biodiversidad en la región.
Reinyección de agua y emisiones atmosféricas
Otra de las solicitudes de Parex que ha causado alarma entre los asistentes es la disposición de aguas residuales y la reinyección de fluidos en formaciones subterráneas. Parex busca permiso para reinyectar hasta 360.000 barriles al día, y hasta 360 millones de pies cúbicos de gas, a través de un máximo de 45 pozos inyectores. Esta práctica, conocida como recobro mejorado, ha sido cuestionada por su potencial para causar sismos y otros problemas ambientales, como la contaminación de acuíferos.
Asimismo, la empresa solicitó autorización para emisiones atmosféricas, necesarias para las operaciones de fuentes fijas del proyecto. Estas emisiones también son una fuente de preocupación para las comunidades, que temen que la contaminación del aire afecte la salud de los habitantes locales y contribuya al cambio climático.
La masiva salida de la audiencia tras la intervención de Víctor Ecue no solo fue una muestra del rechazo local al proyecto de Parex, sino también un recordatorio de la capacidad de las comunidades para organizarse y resistir ante proyectos que consideran perjudiciales para su territorio y su forma de vida. La lucha en Tello es solo una parte de una resistencia más amplia que se está gestando en todo el departamento del Huila y en otras regiones de Colombia, donde las comunidades indígenas y campesinas están defendiendo sus derechos al agua, la tierra y el medio ambiente.
Ecue, en su discurso, dejó en claro que esta lucha no es solo de los habitantes de Tello, sino de todo el país. “Tenemos que apoyarnos entre todos, porque si permitimos que este proyecto siga, después será en otro lugar, y así sucesivamente. Esto es una batalla por el futuro de nuestras comunidades y de nuestra Madre Tierra.”
