El gobernador de Florida ha llamado «la legislación más fuerte contra la inmigración ilegal» en el paísl
La ley firmada por el gobernador del estado de Florida Ron DeSantis la semana pasada dificulta que los inmigrantes indocumentados vivan en el estado e impone severas sanciones a quienes no solo los contraten sino que también los transporten en sus vehículos y es que las estadísticas proporcionadas por el Instituto de Política Migratoria, con sede en Washington, D.C., fijan el número de inmigrantes indocumentados que viven solo en el estado de Florida en 772,000.
La población inmigrante es crucial para la economía norteamericana y en especial para la Florida, especialmente en sectores como la agricultura, la construcción y el sector hotelero, donde con frecuencia reemplazan a los trabajadores estadounidenses.
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A partir del 1 de julio, cuando la regla entre en vigencia, todas las empresas con más de 25 empleados están obligadas por ley a verificar el estado legal de sus nuevos empleados mediante el sistema E-Verify, un sitio web que permite confirmar la empleabilidad de un inmigrante desde un punto de vista legal.
A los empleadores que ignoren este sistema se les puede revocar su licencia de empleador, entre otras sanciones, y enfrentar otras también. La nueva ley impone multas a quienes «a sabiendas y voluntariamente» transporten a estos inmigrantes ilegales a Florida desde fuera del estado o de la nación.
Se establece que transportar por primera vez a estas personas, sin que sean menores de edad, será sancionado como delito de tercer grado, acarreando una posible pena de hasta 5 años de prisión y una multa de hasta $5,000 USD por persona transportada.
Los reincidentes, los menores trasladados y los grupos de más de cinco inmigrantes pueden ser acusados de un delito de segundo grado, que conlleva una sentencia potencial de hasta 15 años de prisión y una multa máxima de 10.000 dólares estadounidenses por persona.
También se restringirá una cláusula que establezca que no pueden usar licencias de otros estados de la nación para conducir en Florida y que se les prohibirá hacerlo si no pueden demostrar que su presencia estaba legalmente autorizada en el momento en que obtuvieron la licencia en otro estado. Según información de la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales, existen regulaciones en 19 estados y el Distrito de Columbia que permiten la emisión de licencias de conducir a inmigrantes indocumentados.
Además de estas restricciones, la nueva ley prohíbe que los condados y municipios den dinero a cualquier persona o cosa para que puedan emitir documentos de identidad u otros documentos a extranjeros indocumentados.
Por último, pero no menos importante, la nueva ley exige que los hospitales que tratan a pacientes de Medicaid, el programa de salud para personas de bajos ingresos, incluyan una pregunta en sus formularios de admisión para determinar si un paciente es ciudadano estadounidense, una residente legalmente o extranjero sin autorización para estar en el país.
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Los centros de salud deberán presentar a la Agencia Estatal de Administración Sanitaria un informe trimestral sobre el número de pacientes de cada categoría atendidos en urgencias o ingresados en el período correspondiente. Desde que DeSantis firmó la ley el miércoles 10 de mayo, la prensa local de Florida ha publicado una serie de historias que afirman que algunos de estos trabajadores indocumentados han dejado de ir a sus trabajos e incluso se están mudando a otros estados por miedo. influenciado por la nueva norma.
El gobernador de Florida ha recibido críticas por su postura contra la inmigración ilegal en numerosas ocasiones. En septiembre de 2022, el gobierno de Florida contrató un avión privado para transportar a cincuenta inmigrantes, la mayoría de ellos de Venezuela, desde Texas hasta la opulenta isla de Martha’s Vineyard, lo que desató un acalorado debate.
La nueva ley asigna $12 millones adicionales para este tipo de operaciones al programa de reasentamiento de migrantes de Florida. Se dice que las políticas del presidente Joe Biden, que según DeSantis violaron su deber de proteger el territorio de los EE. UU., causaron el caos en la frontera de los EE. UU. DeSantis usa este caos como justificación para la nueva ley.