El dolor de pecho es el síntoma que más se destaca en un ataque cardíaco, sin embargo, otras molestias pasan desapercibidas sin siquiera ser asociadas con un paro, como los dolores en la espalda incluso en el cuello. La Organización Mundial para la Salud (OMS) señaló que, tanto los accidentes vasculares cerebrales y los ataques al corazón suelen ser fenómenos agudos que se deben sobre todo a obstrucciones que impiden que la sangre fluya hacia el corazón o el cerebro, que en muchos casos se debe a la acumulación de grasa en los vasos sanguíneos, mismos que permiten el paso de la sangre al cerebro y al corazón.
Por tanto, es importante entender que no en todos los casos los síntomas de ataques cardíacos son iguales, en algunas personas se pueden presentar de manera leve y en otras, grave. Es así que, hay que tener en cuenta los siguientes síntomas: dolor en el cuello, dolor en la espalda, la mandíbula y los dientes, cansancio, fatiga y náuseas. Empero, tal como se mencionó anteriormente, no se pueden generalizar los síntomas, por ejemplo, las mujeres pueden experimentar un dolor agudo en la espalda mientras que los hombres quizá, no.
Es entonces que los ataques cardíacos pueden ser repentinos, sin embargo, en otros, el cuerpo envía señales que advierten de un posible paro. Según la Clínica Mayo, una de las principales causas de un ataque cardíaco es una enfermedad de arterias coronarias, que tal y como lo explica National Heart, Lung, and Blood Institute, las arterias del corazón no pueden aportar suficiente cantidad de sangre oxigenada al corazón.
Es importante mencionar que cualquier persona puede sufrir un ataque cardíaco, no obstante, las mujeres mayores de 55 años y los hombres de 45 son más propensos. Entre tanto, los siguientes factores inciden en la aparición de esta enfermedad: obesidad, diabetes, presión arterial alta, colesterol y estrés.