Hace unos días, entró en vigencia en Colombia la Ley 2101 de 2021, una iniciativa aprobada en el Congreso que busca reducir las horas laborales semanales de los colombianos. De acuerdo con la ley, se disminuirá gradualmente el tiempo de trabajo desde las 48 horas actuales a 47 horas semanales en un primer momento, hasta llegar a 42 horas a la semana para el año 2026.
Por: Anderson Hernández
La ley, propuesta por el expresidente y exsenador del Centro Democrático, Álvaro Uribe, tiene como objetivo no quedarse atrás de otros países de América Latina que han implementado medidas similares para mejorar la calidad de vida de los trabajadores y aumentar la productividad. Por ejemplo, México está evaluando la posibilidad de reducir las horas laborales de 48 a 40 a la semana, mientras que Chile ya ha pasado de 45 a 40.
No obstante, la aplicación de la ley ha generado dudas en algunos sectores. Una de las principales interrogantes se refiere a si la hora del almuerzo cuenta o no como horario laboral. El Departamento de la Función Pública ha señalado que, aunque la hora del almuerzo no se considera parte de la jornada laboral, los empleados pueden acordar de manera conciliatoria con su entidad un espacio para disfrutar del almuerzo sin afectar la jornada máxima laboral de 44 horas semanales.
Además, se han presentado cuestionamientos sobre el valor de la hora ordinaria de trabajo. Inicialmente, el Ministerio del Trabajo afirmó que el cálculo del valor de la hora se mantendría como se ha venido utilizando, dividiendo el salario ordinario mensual entre 240 horas (30 días al mes por ocho horas diarias). Sin embargo, en un nuevo pronunciamiento, la autoridad administrativa cambió su postura y concluyó que el valor de la hora se incrementaría automáticamente debido al menor número de horas que conforman la jornada máxima.
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Esta modificación del valor de la hora trabajada podría generar controversia, ya que hasta la fecha nunca ha sido discutida ni avalada por ninguna autoridad judicial o administrativa. La nueva interpretación podría dar lugar a posibles reclamaciones que hasta el momento no han sido objeto de controversia.
Por otro lado, un reciente informe de productividad laboral de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) reveló que Colombia ocupa el último lugar entre los países miembros en términos de aporte de cada hora trabajada al producto interno bruto (PIB). A pesar de la reducción gradual de las horas laborales, el país aún enfrenta retos en este aspecto.
A medida que la implementación de la Ley 2101 avance y se reduzcan las horas de trabajo, será fundamental resolver las dudas y controversias surgidas en torno al valor de la hora trabajada y garantizar que las medidas contribuyan efectivamente a mejorar la productividad laboral y el bienestar de los trabajadores colombianos.
