Gloria Camargo
Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han declarado que el acceso a Internet de calidad es un derecho universal y es responsabilidad de las autoridades de cada país brindar una conectividad accesible y equitativa para todos sus ciudadanos. En Colombia, el gobierno ha prometido garantizar que más del 85% de los colombianos tengan acceso a un servicio de Internet de calidad para el año 2026, sin importar su ubicación en el país.
Sin embargo, el país aún enfrenta grandes desafíos para lograr este objetivo. Colombia tiene una de las tasas de penetración de Internet más bajas de América Latina, con una cobertura de Internet 4G muy baja en comparación con otros países de la región. Se estima que todavía alrededor de 10 millones de colombianos están conectados a la red de Internet 2G, y muchas personas en áreas rurales no tienen acceso a ningún tipo de cobertura, lo que aumenta la brecha digital existente en el país.
Solo el 43,3% de los hogares en Colombia tienen acceso a algún plan de Internet de calidad, con una brecha significativa entre las zonas urbanas y rurales. Solo el 34% de los hogares rurales tienen acceso a Internet, mientras que el 70% de los hogares urbanos tienen acceso. Las desigualdades en el acceso a Internet son evidentes, con solo el 28% de las viviendas de extracto 1 teniendo acceso al servicio en comparación con el 80% de las viviendas de extracto 5 y 6.
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Uno de los principales desafíos que enfrenta Colombia es la falta de infraestructura de telecomunicaciones en áreas rurales y remotas. Muchas regiones del país no cuentan con la infraestructura necesaria para proporcionar acceso a Internet confiable y de alta velocidad, lo que dificulta el acceso a servicios en línea y la educación en línea para aquellos que viven en estas áreas. Además, el costo de los servicios de Internet sigue siendo un problema significativo para muchas personas en Colombia.
Para superar estos desafíos y lograr el objetivo del gobierno de proporcionar conectividad de calidad al 85% de la población, se necesitan esfuerzos continuos para mejorar la infraestructura de telecomunicaciones y reducir los costos de los servicios de Internet en todo el país. El proyecto de conectar las zonas más remotas donde la conectividad aún no está disponible es un paso importante en la dirección correcta para garantizar que todos los colombianos tengan acceso a Internet de calidad. Es vital que el gobierno siga trabajando para garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a este servicio fundamental en la actualidad.
