Durante varios años los oporapense vienen sufriendo de enfermedades gastrointestinales debido a un sistema de acueducto obsoleto y poco óptimo. Aunque durante el 2020 y 2021, la cifra de consultas médicas por esta enfermedad redujo notoriamente, en esta vigencia, está aumentando levemente, por lo que se espera, seguir trabajando, en esta oportunidad enfocados en la zona rural.
DIARIO DEL HUILA, REGIONAL
Por: Johan Eduardo Rojas López
Uno de los principales problemas existentes en Oporapa, Huila, radica en el sistema de acueducto poco óptimo y obsoleto, que generó durante años enfermedades gastrointestinales. Ahora, gracias a las gestiones adelantadas se ha logrado brindar agua potable en la zona urbana del municipio y así disminuir el número de casos registrados con esta enfermedad durante los dos años anteriores. Sin embargo, aunque el panorama del 2020 (58 casos) y 2021 (67 casos) fue alentador, este año, la cifra ha aumentado levemente (69 casos).
Es importante recalcar que la cantidad de casos de enfermedades gastrointestinales entre el 2015 y 2019, oscilaron entre 204 y 447, mientras que, en los años siguientes, se registró una disminución considerable llegando a cifras de 58 casos. Ahora bien, el objetivo principal de la Administración Municipal siempre consistió en mejorar la calidad de vida de los habitantes, potabilizando el agua, lo que directa o indirectamente, dejó como resultado las importantes cifras anteriormente mencionadas.
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Juan Carlos Rúales Ordóñez, alcalde de Oporapa, señaló que, “hay que reconocer que directamente nosotros no teníamos como objetivo principal realizar este trabajo en temas de salud sino en darle al casco urbano de Oporapa agua potable, continua y abundante. Entonces indirectamente por medio de esta política de salud pública de potabilizar el agua hemos dado esta reducción considerable de indicadores en el año 2020 y 2021. El aumento de los dos casos que se han registrado durante este año corresponde quizás a la dejación con los temas de bioseguridad que se venían teniendo durante los años que se registró la reducción”.
A su vez, recordó que históricamente el municipio ha contado con agua no potable, continua y abundante, por lo que, la utilización del líquido dejó de ser tan importante para la ciudadanía pese a que causaba problemas de salubridad y desconfianza por su notable turbiedad. Los niños y adultos mayores, han sido los más afectados frente a esta situación, no obstante, esto no ha dejado enfermos de gravedad o muertos.
Las enfermedades gastrointestinales persisten en Oporapa
A pesar de los significativos avances y disminución de consultas médicas por este tipo de enfermedades durante los años 2020 y 2021, la situación se sigue presentando especialmente en las zonas rurales. Tanto así que, la mayoría de los 69 casos que se han registrado en lo corrido del 2022 obedecen a zonas veredales donde aún el agua no es potable. Según Rúales Ordóñez, también se presenta debido al cuidado erróneo que los ciudadanos tienen con las poblaciones más vulnerables, por tanto, este panorama también ha requerido de un trabajo enfocado en la conciencia ciudadana.
Explicó además que, “nosotros a fecha de hoy hemos realizado cuatro mantenimientos de acueductos en la zona rural, un mejoramiento grande del acueducto aquí en el casco urbano y avanzamos a través de convenios solidarios con las juntas de acción comunitaria para fortalecer los acueductos rurales. Hay que recordar que nosotros recibimos el municipio con un servicio deficiente. Aquí cada uno consumía el agua sin ningún racionamiento”.
Estas situaciones se evidenciaban directamente en el sistema de consultas médicas por urgencias con sintomatología específica, como diarrea acuosa, calambres estomacales, náuseas o vómitos y, a veces, fiebre. Sin embargo, para ese momento, se desconocían las causas de las infecciones en la población, de ahí que, el mejoramiento del agua se tradujo en la reducción de enfermedades.
Por ahora, pretenden seguir reduciendo las cifras y analizar el leve aumento presentando este año a comparación de los dos inmediatamente anteriores. Es así como, se enfocarán en la zona rural para que los campesinos también puedan tener un líquido digno, tal cual lo tiene la zona urbana y así mitigar este tipo de enfermedades.
“El campo es el que mueve la economía de nuestro municipio. El 85% de nuestro pueblo es campesino y tenemos que trabajar con las juntas admiradoras de acueducto veredales para poder llevarles allá la potabilización”, concluyó.
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Precauciones
Dunia Yofanna Perdomo Muñoz, directora local de Salud del municipio, dijo que, “las intervenciones destinadas a prevenir las enfermedades diarreicas, en particular el acceso al agua potable, el acceso a buenos sistemas de saneamiento y el lavado de las manos con jabón permiten reducir el riesgo de enfermedad”.
En ese sentido, detalló la importancia de hervir el agua para el consumo humano y lavar las manos frecuentemente con agua y jabón, en especial antes de preparar, servir o consumir alimentos, después de ir al baño, cambiar un pañal, tener contacto con mascotas y al llegar a casa.
Finalmente, el leve aumento durante el 2022 podría obedecer al abandono de las medidas de bioseguridad adoptadas. De ahí la importancia de revisar el líquido vital de consumo.
¿Qué es la gastroenteritis?
La gastroenteritis es una infección intestinal que incluye la presencia de signos y síntomas como diarrea acuosa, calambres estomacales, náuseas o vómitos y, a veces, fiebre.