DIARIO DEL HUILA, CONTEXTO
Por: Daniela Gutiérrez
Fueron capturados Jobanny Ríos Soria, alias “Piquiña” o “Scooby” y Edwin Ríos Soria alias “el Mono” quienes al parecer tenían intenciones de retomar la presencia armada en el municipio de Algeciras con influencia criminal de actores armados del departamento del Cauca. Los implicados estarían vinculados a homicidios y tráfico de estupefacientes.
Los hermanos Jobanny Ríos Soria, alias “Piquiña” o “Scooby” y Edwin Ríos Soria alias “el Mono”, tenían en el Huila, según las autoridades, la intención de retomar la presencia armada en el municipio de Algeciras para así fortalecer los corredores de movilidad del narcotráfico, la provisión de material de guerra e intendencia y la ejecución de actividades extorsivas, desarrollando todo un plan criminal que habría incluido asesinatos selectivos, intimidaciones, desplazamiento forzado y ataques a la Fuerza Pública.
Durante meses de labores investigativas, las autoridades lograron la recolección de elementos probatorios y acciones de seguimiento que finalizaron cuando en el barrio Versalles de Fontibón en Bogotá, tropas del Gaula Militar de la Novena Brigada del Ejército Nacional y funcionarios de la Unidad Especial de Investigación de la Fiscalía General de la Nación, lograron hacer efectivas las órdenes de captura que pesaba contra los hermanos, hoy considerados “símbolos del mal”.
Perfil delictivo
Alias “piquiña” al parecer era el cabecilla de la Comisión de la autodenominada Columna Móvil Dagoberto Ramos en Algeciras Huila. Tiene 18 años y llevaba dos años en el Grupo Armado Organizado Residual, lo que indicaría que fue reclutado por la estructura cuando aún era un menor de edad.
Era quien además venía manejando las finanzas a través de intimidaciones y extorsiones a empresas contratistas, consorcios viales, trasportadores y gremio agrícola, para fortalecer el andamiaje económico y de incrementar en número de hombres la Red de Apoyo de Estructuras Residuales.
“Para lograr sus fines como cabecilla, habría realizado varias acciones delictivas, entre ellas su presunta participación en el lanzamiento de una granada de mano a un vehículo de la Policía Nacional en el mes de junio del 2021 en la localidad algecireña”, confirmó el coronel Edwin Becerra Díaz, comandante de la Novena Brigada.
Al mes siguiente, este hombre habría realizado grafitis alusivos a la organización ilegal en el sector de Casa Blanca, así como su participación en un retén ilegal en la Y, vía Algeciras – Campoalegre y el presunto homicidio de Miguel Medina Celada el 25 de Julio del 2021 en el sector conocido como El Casil.
El acervo probatorio permitió que un Juez de Control de Garantías emitiera en su contra orden de captura por los delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir y tráfico fabricación y porte de armas de fuego.
Así mismo la autoridad competente compulsará copias a la Fiscalía de Infancia y Adolescencia por la presunta participación del joven en más de 20 asesinatos selectivos a líderes sociales y personal de reincorporados pertenecientes al proceso de paz, así como la presunta participación en la masacre perpetuada el 31 de mayo del 2021 en la vereda Quebradón Sur en el municipio de Algeciras Huila, para que se investiguen sus actuaciones como menor de edad.
Alias “el mono”
Por su lado “el mono” sería el enlace armado de la estructura residual e integrante de la Red de Apoyo. Tiene 21 años de edad, de los cuales cinco de ellos, al parecer ha adelantado acciones delictivas para la estructura armada ilegal.
Cuenta con orden de captura por concierto para delinquir, además de ser el presunto integrante de la Red de Apoyo a Estructuras, y se desempeñaría como enlace armado de la Quinta Comisión entre los municipios de Páez Belalcázar en el Cauca y Algeciras Huila.
Entre sus acciones estaría la de garantizar los corredores de movilidad, de proveer y movilizar material de guerra y logístico hacia el municipio de Algeciras, dando cumplimiento al plan estratégico de expansión y retoma de sus antiguas áreas de injerencia.
Golpe significativo
Con la captura de los hermanos Ríos Soria, “la estructura pierde mando y control, se neutralizan las acciones criminales en el Huila, así como su capacidad de realizar inteligencia delictiva a la Fuerza Pública y se interrumpen sus actividades logísticas y financieras”, afirmó el coronel Becerra Díaz.
Una vez más se contrarrestaron intenciones de expansión territorial y de fortalecimiento financiero y armado de grupos al margen de la ley. Estas acciones “permiten enviar un mensaje de seguridad a la comunidad, de protección de los activos estratégicos y de bienestar para los huilenses”, concluyó el comandante de la Novena Brigada.
