Tras un nuevo aniversario del hundimiento de la majestuosa embarcación, se dan a conocer algunas curiosidades que llaman la atención del mundo.
Por: Angélica Andrade
El lugar exacto donde se encontraba el iceberg con el que colisionó la que era una prometedora embarcación, según la Enciclopedia Británica, una de las casas editoriales más conocidas de Estados Unidos, fue el océano Atlántico a aproximadamente 400 millas náuticas, 740 kilómetros, al sur de Terranova, la famosa isla canadiense. Sobre el aviso del siniestro a las autoridades respectivas, se dio una vez trascurrían las 23:40 horas del 24 de abril de 1912 y el primer oficial del Titanic William Murdoch, decidió emitir la orden para que el buque girara hacia el costado. No obstante, era una determinación bastante y, pese al intento, el gran buque chocó con el gigante bloque de hielo.
La primera zona del Titanic en ser vencida, fue la banda de estribor del costado derecho, provocando la ruptura de al menos cinco de los compartimientos posiblemente estancos de la proa, haciendo que el capitán Edward Smith se encargara de enviar el mensaje en el que solicitaban apoyo a los distintos organismos de socorro, pero desafortunadamente, la totalidad de embarcaciones que se encontraban en la zona permanecían lo suficientemente lejos como para alcanzar a llegar de manera oportuna.
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A su vez, se inició con el lanzamiento de los 20 botes salvavidas, dirigidos a priorizar mujeres y niños sin lograr que el espacio alcanzara para todos los ocupantes que cumplían con estas dos situaciones, pues solo había cupo para 1178 personas: “Este problema se agravó porque los botes salvavidas se lanzaron muy por debajo de su capacidad”, señala la Enciclopedia, agregando que solo 705 fueron rescatados en los botes.
En cuanto a la temperatura del agua en el instante del hundimiento, se sabe que era de aproximadamente -2° Celsius (28 °F), razón por la que, los pasajeros que se lanzaron al océano con chalecos pusiesen haber padecido hipotermia o ataques cardíacos, agregó la empresa encargada del salvamento del naufragio.
Con respecto a los ocho músicos contratados para amenizar el recorrido, al igual que se ve en la icónica película Titanic de 1997 de James Cameron, ellos interpretaron sus instrumentos hasta el último minuto, pese a la situación. No se ha precisado sobre el tiempo que duraron, no obstante, se infiere que actuaron hasta pocos minutos previos al hundimiento del barco: “La especulación también rodeó la última canción que interpretaron, probablemente Autumn o Nearer My God to Thee”, explica Britannica, añadiendo que, infortunadamente, ninguno de los músicos sobrevivió.
