El Gobierno de Panamá anunció el cierre de la mina de cobre valorada en US$10.000 millones perteneciente a First Quantum Minerals Ltd., tras un fallo unánime de la Corte Suprema en su contra. El presidente Laurentino Cortizo declaró que se iniciará «el proceso de transición para el cierre ordenado y seguro de la mina», aunque no especificó la duración del mismo. La producción ya se había detenido debido a protestas que impedían el suministro a la mina.
La decisión gubernamental sigue seis semanas de tensiones en Panamá, marcadas por protestas generalizadas después de la aprobación de un nuevo contrato operativo de varias décadas para la mina de First Quantum. Inicialmente, el presidente Cortizo anunció un referéndum sobre el proyecto, pero posteriormente, aguardó el fallo de la Corte Suprema. El tribunal dictaminó por unanimidad la inconstitucionalidad de la ley que aprobaba el contrato.
El cierre de la mina, llamada Cobre Panamá, privaría al gobierno panameño de una significativa fuente de ingresos y podría desencadenar una prolongada batalla legal en arbitraje internacional entre la minera canadiense y Panamá. First Quantum no ha comentado directamente sobre el cierre, pero previamente indicó que estaba evaluando el fallo y reservándose sus derechos legales.
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Además de afectar las finanzas del país, el cierre de la mina podría tener un impacto en el suministro mundial de cobre. Aunque la mayoría de los analistas pronostica un excedente en 2024, la permanencia cerrada de Cobre Panamá podría cambiar significativamente esa perspectiva.
Para First Quantum, el cierre de la mina representaría la pérdida de su mayor activo productor, responsable de aproximadamente la mitad de la producción de cobre esperada por la compañía este año. Las acciones de First Quantum experimentaron una caída de hasta un 8,3% el miércoles en Toronto.
Las implicaciones fiscales para Panamá son preocupantes, según Ricardo Penfold, director gerente de Seaport Global, quien estima que el cierre aumentará el déficit fiscal en alrededor del 0,6% del PIB.
El cierre de la mina también ha surgido como un tema crucial en el período previo a las elecciones generales en Panamá del próximo año. La incertidumbre sobre el futuro de la mina se intensifica con las elecciones, y algunos analistas especulan sobre la posibilidad de que un nuevo gobierno pueda reconsiderar las decisiones recientes.
Este cierre forzado de una mina rentable, con décadas de reservas restantes, podría tener repercusiones en la industria mundial, desafiando la tendencia de aplicar regímenes impositivos más estrictos o demandas de un mejor desempeño ambiental. Para First Quantum, el arbitraje parece ser la última opción, un proceso que podría extenderse durante años y con costos millonarios.
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