Gloria Camargo
La reforma laboral propuesta por el Gobierno de Colombia ha generado un intenso debate entre expertos y analistas económicos. En el reciente seminario de Perspectivas Económicas para 2023, organizado por Anif y Fedesarrollo, se discutió ampliamente sobre las implicaciones de esta reforma y su posible impacto en el sector empresarial y laboral del país.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, presentó estimaciones que indican que la implementación de la reforma laboral podría resultar en un aumento de los costos para las empresas en un 16,3%. Además, destacó la importancia de abordar las reformas de manera integral, señalando que la baja cobertura del sistema pensional, que actualmente solo alcanza el 25%, se debe principalmente a la alta informalidad laboral, que afecta al 58% de la población. Mejía argumentó que la reforma laboral propuesta podría agravar aún más esta problemática, aumentando el desempleo y la informalidad.
Le puede interesar: ¡A trabajar! privados de la libertad podrían laborar
Por su parte, Mauricio Santamaría, presidente de Anif, expresó su preocupación por el impacto negativo que la reforma laboral podría tener en la generación de empleo y la productividad laboral. Según Santamaría, la propuesta actual beneficiaría principalmente a las personas que ya cuentan con beneficios laborales, especialmente a los sindicalizados, sin ofrecer soluciones efectivas para la población vulnerable. Asimismo, sugirió que el umbral del pilar contributivo de la reforma pensional debería reducirse a un salario mínimo.
En cuanto a las proyecciones económicas para el año 2023, Fedesarrollo estima que la tasa de inflación (IPC) se ubicará en un 9,12% y la tasa de interés en un 11%. Estas estimaciones coinciden con las del Banco de la República, que ha anunciado una disminución gradual de la inflación y la convergencia hacia la meta del 3%, lo que implicaría un inicio del descenso de las tasas de interés.
En términos de crecimiento económico, Fedesarrollo pronostica un aumento del 1,5% para 2023, ligeramente por encima de las estimaciones del Banco de la República. Esto indica una desaceleración importante en comparación con el crecimiento experimentado entre 2021 y 2022, que generó un rebote fuerte en comparación con otros países de la región.
