En la noche del miércoles anterior, se presentó un fuerte diluvio, que los neivanos jamás habían presenciado en esta ciudad, por las fuertes precipitaciones que causaron inundaciones, caídas de árboles, taponamiento de las alcantarillas, viviendas destruidas y parte del sistema eléctrico colapsado, entre otras afectaciones que padecimos. Además de una fuerte granizada, que cubrió amplios sectores de la ciudad, generó un temor entre todas las familias neivanas, que no podían creer lo que estaba sucediendo. Algunas personas adultas comentaban, que esta anormalidad climática no se había presentado. Lo que, si es repudiable, es que algunas personas desadaptadas sociales aprovecharon para hurtar algunas tapas de alcantarillas, dejando un riesgo latente para el tránsito automotor y de los motociclistas. Absurdo que ésto suceda en la capital del departamento. Igualmente se pudo detectar que las aguas lluvias sobrepasaron la capacidad de circulación subterránea, provocando inundaciones en las principales vías de la zona urbana. Lo anterior es producto, porque muchas personas incultas ambientalmente arrojan basuras a las alcantarillas, taponando dicha infraestructura y que se ve colapsada en épocas de lluvias fuertes.
Recientemente el Ideam expresó que el país, había entrado a un periodo de altas temperaturas por el fenómeno del niño. Pero dichos anuncios son errados. Lo que está ocurriendo en algunas zonas del país, que durante el día tenemos fuertes calores y en las noches, se arrecian grandes aguaceros, como lo ocurridos antenoche. Seguiremos soportando los impactos negativos en la infraestructura productiva provocado por el cambio climático. que están permeando el bienestar general de la sociedad. Igualmente se están generando grandes procesos desestabilizadores en la dinámica económica del territorio huilense. El uso masivo del carbón y de los hidrocarburos como combustibles para generar energía eléctrica y para el uso en la locomoción, están creando grandes desequilibrios en el medio ambiente. Es indispensable que los países empiecen a cambiar estos usos industriales y enfocarlos para la producción de bienes sustentables. Estamos asistiendo a las diferentes transformaciones que está presentando el clima, provocando variaciones bruscas en las temperaturas.
La naturaleza sigue su marcha, con todas sus manifestaciones climáticas, y lo que de ellas se desprende, a veces con duras consecuencias. El mundo parece haber cambiado en todas sus líneas. En lo que se refiere al invierno en Colombia, que los antiguos tenían en mente en los meses de mayo y junio, lo que llamaban comúnmente el “general invierno”, las lluvias están golpeando hoy con dureza varias zonas, y, como es natural, para estos eventos no se está lo suficientemente preparado. El medio ambiente se encuentra en serios problemas para conservar su equilibrio, producto de los drásticos daños sufridos, que han sido causados por la industrialización y el crecimiento demográfico inadecuado, lo cual ha generado un temor generalizado entre nosotros, porque se encuentra en vilo el bienestar actual y el de las próximas generaciones.
