Por Hernán Guillermo Galindo M
Desde el 2014 los habitantes de Altos del Limonar vienen luchando para conseguir que les cumplan con un fallo del Tribunal Administrativo del Huila que ordena al municipio reubicar a los moradores cuyas viviendas se encuentran en zona de alto riesgo por estar construidas a menos de 30 metros de la ribera de la quebrada La Torcaza. Están cansados de tocar puertas y no conseguir una respuesta.
Son cerca de siete años los que llevan los propietarios de viviendas en la urbanización Altos del Limonar en la comuna seis de Neiva, en busca de una solución a las inundaciones que se presentan en temporada de lluvias y al mal estado de la vía, ocasionadas por las crecientes de la quebrada La Torcaza.
Diario del Huila, los visitó por invitación de la Junta de la JAC, para conocer en terreno la problemática que viven desde el año 2014.
Maria Angélica Cruz, es la vicepresidenta de la Junta de Acción Comunal de esta urbanización construida hace unos 30 años y a la que llegaron a vivir, personas que con esfuerzo se hicieron a una vivienda a través de créditos.
“Esta problemática la venimos padeciendo desde el momento en el que compramos las casas, en el año 2005, estas fueron construidas en cercanías a una quebrada que está metida dentro de unos tubos, pero en temporada alta de lluvias, se colapsa y nos causa inundaciones”, comenta María Angélica.
“Desconocemos de qué manera la constructora obtuvo los permisos ambientales, porque si se lee la norma, esta dice que las viviendas no pueden estar a menos de treinta metros de una quebrada y aquí hay incluso dos casas que están dentro de la quebrada y el resto alrededor”, agrega.
Tocando puertas
Los perjudicados en Altos del Limonar por la situación han acudido a entidades gubernamentales, comenzando por el Municipio, Las Ceibas Empresas Públicas de Neiva y la constructora, pero como suele suceder aquí en Neiva, unos le botan la pelota al otro y finalmente nadie responde.
Por eso acudieron a una Acción popular, la cual fue fallada a su favor en el año 2014, y en su parte resolutiva le da dos años al municipio y a Las Ceibas para que cumplieran la orden. Han pasado siete años y no ha habido solución.
“Ante la negativa de una respuesta e incumplimiento del fallo de la Acción popular nos vemos ahora obligados a presentar un desacato que es el paso a seguir, porque realmente no vemos que alguna de las entidades se apersone del caso”, retoma la vicepresidenta de la JAC de Altos del Limonar.
Los vecinos de manera conjunta manifiestan que en época de lluvias como en la noche del pasado 7 de mayo, las alcantarillas de aguas lluvias y aguas residuales se rebosan, causando inundaciones y en el peor de los casos se devuelven por los sifones de las casas por lo que no pueden dormir cada vez que llueve.
Los vecinos opinan
Mariana Diaz, una de las afectadas, se refiere a la situación, la que considera realmente dramática; “Esto es tremendo, desde que compré esta casa vivo con gripa a toda hora debido a la humedad, los médicos me han recomendado cambiar de vivienda si no quiero morirme ya. Las paredes de la casa están lacradas, no tengo plata para comprar otra vivienda digna en la cual pueda vivir mis últimos años. Por favor que me solucionen esta situación, gané una tutela y no ha sido posible que me reubiquen o me compren la casa”, manifiesta la ciudadana.
Una de las quejas permanentes de los afectados tiene que ver con que no se realizan visitas en terreno y sobre todo en momentos en los que están en crisis. Les reciben documentos que radican en las diferentes entidades y en otros casos por teléfono, pero no hay presencia para evaluar en terreno.
Farnory García, fiscal de la JAC, padece el mismo problema de sus vecinos. Tiene su vivienda ubicada en la mitad de la calle 20C sur y también se inunda en temporada de lluvias, ha perdido enseres, y ha tenido que hacer arreglos en la vivienda.
“Reitero que acá nos inundamos, pero siempre la respuesta es que no estamos en zona de alto riesgo, que es mentira que nos inundamos y en esas no la pasamos”, sostiene.
Las crecientes de la quebrada La Torcaza, además ha colapsado la vía que se quedó sin pavimento y necesita ser recuperada, es otra de las peticiones de los moradores de este sector popular en la zona sur de la capital del Huila. La situación de inundación se presenta en todo el sector de Altos del Limonar 2. En la carrera 36 en las calles 19 hasta la 22.
Pocas respuestas
Como comentaron los propios implicados en la situación, son cerca de siete años los que llevan buscando una solución, con un fallo de una acción popular a favor, pero sin respuesta.
Diario del Huila, intentó obtener una respuesta de parte de las autoridades mencionadas por los vecinos de Altos del Limonar, pero no fue posible.
Lo único que se conoce por referencia de situaciones similares es que los damnificados son primero caracterizados para luego ser tenidos en cuenta, primero para la entrega de ayudas en el caso de inundaciones y segundo para entrar en un proceso de reubicación cuando sus viviendas se encuentran en zonas de alto riesgo.
Como está planteada la situación hasta el momento, solo cuando se surta la nueva acción que pretenden interponer, que es una acción de desacato al fallo que les favoreció de la acción popular, que conminaba a las autoridades a resolverles la situación de reubicación.
Este es solo uno de tantos casos que se presentan en Neiva y en todo el país en donde, muchos por solucionar su necesidad de tener vivienda propia, compran y no observan en detalle en dónde o a dónde se están metiendo y las posibles afectaciones a las que se pueden enfrentar con el paso del tiempo.
