Desde la Administración Departamental, indican que van a ‘atacar’ el contrabando, pues afecta el consumo de bebidas que sí pagan impuestos. En el 2023, el Grupo Anticontrabando, realizó 2.600 visitas a establecimientos comerciales con el fin de conocer si los empresarios han pagado el impuesto al consumo.
De igual manera, se tiene conocimiento que, por el municipio de La Plata y Pitalito, ingresa licor procedente del departamento del Cauca y por la carretera de Planadas, bebidas del Tolima.
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Importancia a licores que pagan impuestos
En este sentido, Sonia Mora, secretaria de Hacienda Departamental indicó: “buscamos sensibilizar a los huilenses para que apoyen y consuman los productos de la región. E invitamos a que la ciudadanía nos denuncie, si están expendiendo licor de otras regiones y vamos a trabajar muy fuerte en este aspecto, pues es una de las directrices dadas por el gobernador, Rodrigo Villalba, de atacar cualquier flagelo que afecte las rentas de la región”.
Con el fin de evitar esta problemática, la funcionaria señaló, que van a realizar operativos con la Policía, Dian y demás instituciones, para evitar el ingreso de licores de otras regiones, asimismo, que los vendedores entiendan que están cometiendo un delito.
Y en cuanto a las rutas, por donde ingresan productos de contrabando, la secretaria, expresó. “Nos están traficando por el departamento del Cauca al municipio de La Plata y por el sur de esta región a Pitalito, de igual manera por el norte, por la vía Planadas, que vienen procedente del Tolima”.
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Primero sensibilizan a los comerciantes
Por su parte, Jairo Guerrero, líder del Grupo Control y Fiscalización del Huila, indicó: “nosotros no solamente vamos a las tiendas a atropellar a la gente, primero se hace una sensibilización, indicándoles ¿por qué no deben vender licor de contrabando? Nosotros específicamente como grupo, buscamos es que los comerciantes hayan pagado el impuesto al consumo”.
Lógicamente, al analizar la estampilla, los operarios se dan cuenta que es falsa, y proceden a confiscar los productos, que luego son enviados a la Secretaría de Salud, donde son estudiados.
Los funcionarios el año pasado, realizaron 2.623 visitas a establecimientos comerciales con el fin de concientizarlos, acerca de la importancia de vender licor legal e invitan a comprar bebidas en sitios debidamente autorizados.
Mercancía aprehendida
En cuanto a las confiscaciones, Jairo Guerrero, agregó: “en las inspecciones hicimos 237 aprehensiones, confiscamos 1.300 botellas de licor entre whisky, aguardiente, ron, vinos y aperitivos. Al igual que 6.800 unidades de cigarrillos y 9.000 de cerveza de contrabando”.
En el primer semestre, indicó el funcionario, la bebida más incautada fue el aguardiente Doble Anís, Néctar, y whisky, y en el segundo periodo en visitas realizadas a los locales comerciales de los municipios, hallaron gran cantidad de cigarrillo de contrabando.
El aguardiente amarillo ilegal, es el licor que más llegó al departamento del Huila. Ya las autoridades policiales y de gobierno, incautaron 80 cajas de este producto. Y son $21.000 que pierde la región, por cada botella de aguardiente adulterado que se expende.
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Aguardiente amarillo y adulteración
Y según el monopolio rentístico del Huila, en la región solo se puede vender aguardiente Doble Anís, sin embargo, al departamento, ha ingresado aguardiente amarillo.
Frente a la adulteración de licores, Cesar Augusto Vargas, técnico operativo del Grupo de Fiscalización a los productos gravados con el impuesto al consumo, expresó: “en los operativos que realizamos, lo que más encontramos es el aguardiente amarillo de contrabando y adulterado, porque está de moda a nivel nacional y el que más adulteran es el aguardiente local. Al igual que varias clases de whisky”.
El funcionario, agregó que la falsificación, se da cuando la conformación físico-química del producto, esta modificada. “En el caso del aguardiente, lo hacen rendir con alcohol, y en cuanto al whisky, para obtener mayor rentabilidad, lo mezclan con mercancía buena y con el fin de obtener el color café, lo revuelven con monedas y alambres oxidados”.
Sanciones a los infractores
En cuanto a las multas y sanciones a que se puede exponer un transportador o un comerciante por vender mercancía de dudosa procedencia, en su momento el secretario de Hacienda, señaló. “En cuanto a los mayoristas, le podrían cerrar el establecimiento y la segunda acción, es la incautación de los productos ilegales. Además, uno toma una botella, la asimila a una legal y le calcula el impuesto sobre el valor de la mercancía, allí empieza un proceso de cobro coactivo por ese dinero”.
En el caso de los conductores de transporte público, que movilizan licor ilegal, se conoció que cobran entre $80.000 y $100.000, por llevar esta clase de productos y de ser abordados por las autoridades policiales, pueden hacerse acreedores a una multa de $500.000.
Y según la Ley 1762 de 2015, en el artículo 319: “el que introduzca o extraiga mercancías en cuantía superior a cincuenta (50) salarios mínimos legales mensuales, al o desde el territorio colombiano por lugares no habilitados de acuerdo con la normativa aduanera vigente, incurrirá en prisión de cuatro a ocho años y multa del 200% al 300% del valor aduanero de los bienes objeto del delito.
Características que tiene un licor legal
En cuanto a las características que tiene un licor legal, Cesar Augusto Vargas, técnico operativo, agregó: “al aguardiente local, lo identificamos principalmente por la estampilla que trae cada botella, donde vienen las características del producto, tiene un código alfanumérico, compuesto por letras y números, es como la cédula de cada uno, no se repite. Además, trae un código QR para identificarlo con el celular y nos da toda la información del licor”.
En el caso de este aguardiente, la botella, cuenta con una tapa tubo, un anillo de seguridad y la tapa normal. La forma más sencilla de conocerlo, es un triángulo que traen todas las botellas, en el negro, la figura es de color rojo, en el azul, es negro, y en el verde, es azul agua marina. Cabe resaltar que la imagen debe ocupar la tapa tubo, el anillo y la tapa normal.
Ya cuando el consumidor destapa la botella, cuando es original, solo al abrirla, el anillo de seguridad automáticamente, se fracciona en dos partes iguales y cuando el producto es adulterado, este no se daña.
“Por ejemplo, por cada diez medias de aguardiente buenas, los facinerosos, sacan hasta cinco cajas de licor adulterado. Por eso cuando llevamos estos productos para que le hagan el respectivo análisis en la Secretaria de Salud, el volumen de alcohol, es mayor, ya que el producto original es de 30% de alcohol”, dijo el funcionario técnico. Por ende invitan a dañar los sellos y la botella, para que caiga en manos de los facinerosos.
