DIARIO DEL HUILA, CONTEXTO
Por: Amaury Machado
Fotografías: Suministradas
Más allá de las medidas para prevenir el contagio de Covid, factores como el alimenticio cobran relevancia para enfrentar el reto de volver a clase al colegio, dejando atrás las rutinas del hogar y la virtualidad.
Tras poco más dos años de pandemia es la primera vez que los estudiantes de educación básica, primaria y secundaria tienen la posibilidad de asistir a las aulas de clase para continuar con su preparación académica. De acuerdo con cifras del Ministerio de Educación Nacional, el 97.7% de los establecimientos educativos oficiales y privados de las capitales del país ya se encuentran habilitadas y recibiendo en modalidad presencial al 100% de sus estudiantes.
En este contexto de presencialidad es importante que no se pierda de vista que el virus continúa circulando y que los niños también son susceptibles de infectarse. De allí que la vacunación es la herramienta más importante para esta vuelta a las aulas, junto con las otras medidas de bioseguridad: uso correcto de tapabocas, lavado de manos constante y distanciamiento físico.
Pero más allá de estas medidas, se vuelve fundamental entender que la salud y el bienestar de los menores no solo están mediados por el COVID-19. Factores como el alimenticio cobran relevancia, sobre todo entender cuáles son los mejores alimentos para enfrentar el reto de volver a clase al colegio, dejando atrás las rutinas del hogar y la virtualidad.
De acuerdo a Elisa María Cadena Gaona, subdirectora de Salud Nutricional, Alimentos y Bebidas, el estado nutricional y de salud de niños y niñas, requiere de un balance adecuado entre las necesidades nutricionales y la oferta de nutrientes, que garantice un crecimiento óptimo de los escolares.
«Se observa que el sobrepeso y la obesidad se ha incrementado en los niños en etapa escolar, debido al aumento de los estilos de vida poco saludables y hábitos alimentarios inadecuados. Bajo este contexto, es importante brindar una alimentación saludable que sea completa, adecuada, balanceada, equilibrada, sostenible y suficiente, con el fin de aportar todos los nutrientes que el niño necesita para sus actividades diarias, esto permite, entre otras cosas, mejorar el rendimiento escolar», explicó.
Por lo anterior, a través de las loncheras podemos aportar entre el 10 % y 15 % de las recomendaciones diarias de nutrientes. Estas loncheras deberían ser variadas, contener diferentes grupos de alimentos como frutas, verduras, cereales integrales, lácteos, carnes, huevos; diferentes texturas, colores y sabores, haciendo más atractivos estos alimentos para los niños y niñas.
Qué debe tener una lonchera saludable
Recuerde que el retorno a las clases presenciales implica un esfuerzo para el cuerpo de sus hijos. No olvide que al momento de alistar lo que va a llevar al colegio, no deben faltar:
-Alimentos energéticos: panes integrales, cereales integrales, galletas integrales tipo avena, ponqué casero, frutas secas, pasas, ciruelas, barritas de cereal, frutos secos tipo maní, nueces, aceitunas, entre otros.
-Reguladores: Jugos de fruta o frutas enteras, fruta deshidratada, fruta picada, verduritas picadas cocidas o crudas.
-Formadores: Leche descremada, yogurt, huevos, jamones y quesos bajos en grasa. Alimentos de origen animal bajos en grasa como: tortilla de huevo, salchichas de pollo o pavo, pollo a la plancha picado en cubitos, pollo deshilachado, entre otros.
Evite poner refrescos muy azucarados o bebidas gaseosas y paquetes, descarte los dulces o preparaciones que tengan exceso de grasa y azúcares. Procure siempre incluir agua y algún líquido bajo en azúcar; preferiblemente jugos de fruta natural.
La lonchera, las clases y el COVID 19
Los expertos en Promoción y Prevención indican una serie de consejos para los niños (y papás) a la hora de consumir la lonchera pues es un momento ideal para el contagio, ante la necesidad de remover el tapabocas para ingerir los alimentos; recuerden que la preparación de los alimentos es tan o más importante que su consumo.
-Lavarse las manos con abundante agua y jabón antes de consumir los alimentos. No solo por el COVID-19, sino también por las actividades propias de un niño en el colegio.
Aconseje al niño que consuma los alimentos en lugares abiertos, con bastante ventilación. No lo aliente a compartir sus alimentos, por el riesgo que implica.
-Procure lavar las frutas antes de consumirlas. Si bien lo puede hacer en la casa, es mejor repetirlo antes de ingerirla.
-Los papás deben fijarse en las fechas de vencimiento de los alimentos antes de consumirlos. Es importante inculcar este comportamiento en los niños.
-Si los niños consumen agua en el colegio, es importante que sea agua potable, que no sea de los grifos pues puede generar problemas gastrointestinales.
-En caso de que tenga un cuadro gripal, no suministre medicamentos, antibióticos o jarabes para la tos a menos que sean formulados por el médico
Finalmente, lo más importante es que los menores entiendan que es posible convivir con el virus siempre y cuando se mantengan e implementen las medidas de bioseguridad. Esta “nueva realidad” implica afrontar espacios en sociedad que son necesarios para la correcta formación de los estudiantes, de allí que su alimentación también sea parte fundamental a la hora del regreso a clases.
Algunos ejemplos de loncheras saludables
1 mandarina, plátano asado con queso.
Fruta picada con yogurt y granola.
Avena casera con sándwich de carne desmechada.
Jugo de mango con sándwich de atún.
Palitos de zanahoria, arepa con queso y jugo de guayaba.
Mazorca con queso, 1 manzana.
Leche, ponqué casero de zanahoria y 1 pera.
Papitas criollas, albóndigas de carne, naranja.
Porción de papaya picada, trozo de queso y galleta de avena.
Tortillas de papa con queso, jugo de lulo.
Kumis con granola integral y un banano.