DIARIO DEL HUILA, CONTEXTO
Por: Daniela Gutiérrez
“Los tomates los entregan como si fueran un embutido, las frutas dañadas. Nos dieron seis libras de arroz, un cuarto de panela y media libra de chocolate para el mes. No sabemos qué hacer, porque todos tienen esto en conocimiento, lo sabe el ICBF, pero no nos prestan atención”. Este es el testimonio de Lida Maritza, unas de las madres comunitarias en Neiva que han manifestado su inconformidad ante irregularidades que se vienen presentando con los mercados para los centros de atención a niños y niñas.
Cerca de 100 centros de atención a la primera infancia del ICBF han venido presentando inconvenientes con el suministro del mercado para la alimentación de los niños y las niñas que hacen parte de estos centros de atención. Desde el mes de febrero se han venido presentando inconvenientes de distinta índole, pero ha sido hasta ahora que las madres comunitarias han decidido dar a conocer la situación.
El número de beneficiarios de cada uno de los hogares de bienestar varía entre 10 y 14 niños aproximadamente, de los cuales varios se han ido retirando debido a la problemática, tal como lo narran varias madres comunitarias.
“Nos están entregando mercados para un mes, sabiendo que no tenemos nevecones dónde guardar las cosas, nosotros les hemos pedido el favor de que el suministro del mercado sea semanal. Sin embargo, lo que están entregando ahora no está en condiciones de durar ni un día”, indicó Lida Maritza, madre comunitaria de la comuna 9 de Neiva.
Según la información proporcionada, el operador que está presentando estos inconvenientes es Fuerza Viva, el cual sólo le proporciona las raciones alimenticias a una parte de hogares de bienestar pues no es el mismo para todas las sedes.
Otra de las denuncias es que no hay una minuta establecida junto con el suministro del mercado, ya que dentro de lo que se entrega se debe especificar cómo debe ser repartido según el número de niños y lo que los operadores entregan.
Mensualmente se están entregando los granos, las galletas y el arroz. Semanalmente se les suministra las verduras, las frutas, la carne, queso y el pollo, “pero muchas veces llega la carne oliendo a feo, así como el pollo y el queso”, contó la madre comunitaria.
Los hogares de bienestar familiar que se están viendo afectados están ubicados en los barrios Alberto Galindo, Eduardo Santos, Luis Carlos Galán y Santa Rosa.
“Un mal servicio”
Alba Yaneth Díaz, madre comunitaria de la comuna Cinco, indicó que se han tratado de comunicar con el operador directamente pero no encuentran respuesta alguna. “Hemos tenido que prestar el servicio de forma intermitente, una semana sí, otra no y los papás han tenido que retirar algunos niños porque a ellos no les sirve que prestemos el servicio a medias”.
Hay preocupación por parte de estas madres comunitarias porque muchos de los niños que atienden son hijos de madres cabeza de familia que deben trabajar largas jornadas para poder llevar sustento a sus casas, y no están contando con un buen servicio por parte de los centros de bienestar familiar.
“A muchas nos ha tocado sacar plata de nuestro bolsillo para poder tenerle el desayuno y el almuerzo a los niños porque nosotras no somos capaces de darles el mercado que envían, además de eso completamos porque seis libras para el mes no alcanzan; eso equivale a dos cucharadas soperas no tan llenas para cada niño y da pesar servirles eso”, narró Díaz.
Por su parte Claudia Sánchez, otra madre comunitaria, expuso que hay diversas comunas afectadas con esta problemática en la ciudad de Neiva como la 1, 6, 5, 9 y 8. “No nos dicen nada, no tenemos una explicación, nos comunicamos por un grupo de WhatsApp con la encargada de enviarnos las raciones, pero no sabemos qué está pasando y porqué están llegando los alimentos en malas condiciones”.
Adicional a esto, las madres comunitarias aseguran que no es sólo la problemática de la comida, sino que están trabajando con muy pocos elementos. No tienen colchonetas dónde acostar a los niños, tampoco suficiente menaje, papelería y otros implementos de primera necesidad.
“Es con un solo operador”
En consulta con una madre comunitaria de la comuna 5 en el barrio El Jardín, que tiene su Hogar de bienestar cerca de las canchas de arena de este barrio, expresó que, en su caso, no ha presentado inconvenientes con las raciones alimentaria y que al parecer el problema es sólo con el operador Fuerza Viva, y que ella trabaja con otro distinto y la situación es favorable.
Aunque se le solicitó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar Regional Huila que concediera una entrevista o emitiera un comunicado de prensa explicando la situación, al cierre de esta edición no se logró obtener respuesta.