Por: Luis Alfonso Albarracín Palomino
Cuando transitamos por la ruta 45, observamos que la empresa Concesionaria encargada de la reconstrucción de ésta, ha venido desarrollando las obras cumpliendo con el cronograma, concertado con el gobierno nacional. Los usuarios observan que la repavimentación y la construcción de otros tramos están quedando muy bien. Pero hay un lunar que deseo comentarlo en estas líneas que publico semanalmente en la primera tribuna de opinión del sur colombiano, y que lo hago de manera constructiva y proactiva para buscar soluciones integrales a una problemática ambiental que se está sucediendo. Cuanto tránsito la vía La Plata Neiva, en la noche se perciben fuertes olores nauseabundos en algunos tramos de la vía. El primer sitio donde se presenta esta anormalidad es cuando se cruza el puente del paso del Colegio, donde el río Paéz se une con el río Magdalena, porque se perciben olores fétidos, cuya procedencia se desconoce. Sucede únicamente en la noche. Deseo aclarar que esta vía no pertenece a la ruta 45.
Cuando ingresamos a la vía mencionada, encontramos algunos sectores que verdaderamente generan incomodidad olfativa a los viajeros, conductores y motociclistas. El segundo, lo encontramos antes del parador del Molino (Mirador del Hobo a orillas de la Represa de Betania). El tercero se encuentra en la curva antes de ingresar a la zona urbana del municipio del Hobo. El cuarto y último está situado antes de pasar los reductores de la Vega (Campoalegre), sentido Hobo Neiva. De día los aromas nauseabundos no se perciben porque los rayos solares lo impiden. Pero en horas nocturnas, se aumenta esta fetidez, cuyos orígenes desconozco. Sería interesante que la CAM designara algunos ingenieros ambientales para que diagnosticaran estos daños que le están haciendo al medio ambiente de estas zonas. Considero mucho a los residentes aledaños que viven en estas zonas putrefactas, que están afectando su bienestar y que paralelo a lo anterior, generan un mal aspecto y una afectación al ambiente paisajístico de esta región.
Si algún lector nos colabora con información sobre las causas que originan estos olores fétidos, se los agradeceríamos para enviárselo a las autoridades ambientales del departamento, para que se tomen correctivos. No quiero generar criticas a las entidades que tienen esta responsabilidad de velar por la preservación de los recursos naturales en la región. Deseo colaborarles para mejorar las condiciones del bienestar a las familias afectadas y de todas las personas que transitamos por estas rutas.
Algunos académicos investigadores, plantean que el olor es percibido por el cerebro como una respuesta a las sustancias químicas volátiles presentes en el aire. En muchas ocasiones, se aprovecha el viaje para dormir y descansar plácidamente. Pero cuando el vehículo pasa por alguno de estos tramos, se despierta abruptamente y hasta ahí llegó el descanso. Inclusive cuando transito en mi carro particular con mi esposa Amparo y mi perro Motas, éste se despierta de manera brusca a pesar de tener los vidrios cerrados y con el aire acondicionado. Es que estos olores son fétidos y nauseabundos. Hasta las mascotas lo perciben.
