DIARIO DEL HUILA, FIESTAS
Por: Hernán Guillermo Galindo M
El Historiador Camilo Salas Ortiz, en un trabajo que viene articulando con otros historiadores, ayuda a comprender la evolución y transformación de nuestras fiestas de San Juan y San Pedro. Es importante entender de dónde vienen y para donde van las fiestas tradicionales en el Huila. Por eso aprovechamos su conocimiento para adentrarnos en los orígenes de las festividades.
Luego de hacer consultas a todos los estudiosos de las fiestas en nuestro país y tener una síntesis documentada de como nacieron las mismas y de donde provienen el San Juan y el San Pedro, Camilo Salas Ortiz hace un recorrido por esos orígenes.
Hay que definir primero qué es una fiesta; “es una reunión de carácter conmemorativo de carácter colectivo en la cual se expresa, alegría, diversión, ceremonia, ritual y alborozo popular”, según lo define la Real Academia de la lengua, manifiesta Salas.
Escribir sobre las fiestas y las actividades lúdicas que se han desarrollado y se realizan en nuestro departamento, nos conduce a la comprensión del ocio y al análisis de las formas del uso del tiempo en nuestras comunidades.
Nosotros los huilenses, con fiestas celebramos acontecimientos religiosos, sociales, políticos, cívicos, patrióticos y familiares entre otros. Nuestras fiestas se expresan en formas diversas dentro del folclor social, tenemos carnavales, festivales, ferias, fiesta de la cosecha, aguinaldos, fiestas patronales y romerías populares.
Salas Ortiz cita al también historiador, Javier Ocampo López, quien sintetiza lo siguiente: “En el trasfondo de las mentalidades colectivas, las fiestas están relacionadas con celebraciones rituales, ante un mito, un acontecimiento religioso, político, patriótico o ante un fenómeno natural determinado que influye en la vida de los pueblos como es el caso de los solsticios y los Equinoccios, en especial las noches que los preceden”.
San Juan
El Historiador pasa a hacer una definición y recuento sobre cómo nació el San Juan en el Huila.
“El San Juan que celebramos los huilenses y tolimenses en el mes de junio, viene desde los tiempos de la conquista, traídas desde España, tienen origen en los tiempos de solsticio de verano y tiene antecedentes tanto en el hemisferio norte como en el sur”, explica.
Los romanos celebraron los dos solsticios, el 24 de junio, celebraban el de verano, luego adquirió la connotación religiosa, al ser incluida en el calendario de la iglesia cristiana conmemoró las fiestas de San Juan Bautista, quien bautizó a Jesucristo en el rio Jordán.
Estas fiestas con profundas raíces míticas solares, son herencia romana convertida en una fiesta religiosa en honor del precursor de la buena nueva. Estas se celebraban de noche y sus símbolos eran el fuego y el agua.
El primero representa el sol abrazador que cae sobre los campos y el segundo el agua que refresca y prepara el nuevo brote. La fiesta de San Juan entre nosotros se celebraba especialmente entre el 23 de junio, vísperas y el 24 el día de San Juan.
Una señal de la llegada de las fiestas en el pasado era la aparición de las grullas, aves migratorias que hasta hace poco hacían su paso por nuestro territorio y entonces era cuando gritábamos; San Juan, San Juan, San Juan.
“También los tambores especialmente en los campos anunciaban la llegada del San Juan, hay que tener en cuenta que es una fiesta de origen popular de autentico sabor campesino, la tradición era ir a las veredas a pasar nuestro San Juan”, agrega el historiador. Por eso se decía que el San Juan en los campos y el San Pedro en las ciudades.
“Aparecían además de los instrumentos musicales y la música, la deliciosa comida de la región; “nos deleitábamos en el Tolima grande con el asado, la lechona, los tamales, los insulsos, el bizcochuelo y la mistela. Tiples, guitarras, tambores, bailes, rajaleñas y mucha simetría son los elementos básicos de la fiesta”, explica Salas Ortiz.
En los tiempos actuales, el San Juan perdió fuerza por la aparición de los reinados que le dan importancia especialmente al San Pedro, sin embargo, hay pueblos como Natagaima en el Tolima y el Hobo en el Huila en donde todavía se celebran, fueron de mucha tradición y muy sonadas.
El San Pedro
Aunque Camilo Salas se comprometió a través de su Facebook, a dar una clase magistral sobre los origines del San Pedro, indagando por otros medios, al igual que el San Juan tiene origen religioso y proviene igual desde la época de la conquista. ¿Cuál es el origen de las fiestas de San Pedro?
Las fiestas de San Pedro, que viene de la tradición católica que por muchos años impartieron los españoles durante la época de la conquista de homenajear a San Juan Bautista. Más adelante, esta celebración se conoció también como las fiestas de San Pedro y San Juan.
El día de San Pedro y San Pablo también conocida como la solemnidad conjunta de San Pedro y San Pablo, se realiza el primer lunes después del 29 de junio. Se conmemora en conjunto a la celebración del Sagrado Corazón de Jesús que, a su vez, ocurre 71 días después del domingo de Pascua.
Pasaron algunos años y en el calendario litúrgico se comenzaron a celebrar las fiestas de San Pedro (Huila y sur y centro del Tolima) con el objetivo de integrar el casco urbano a este festejo caracterizado por cabalgatas, música de vientos y el desfile típico por las calles de la ciudad.
En 1960, según ordenamiento de la dirección de turismo de Huila, se organizó también el Reinado del Bambuco con la participación de conjuntos musicales, danzas folclóricas, carrozas decoradas y candidatas seleccionadas por cada uno de los departamentos del país.
Asimismo, el 7 de diciembre de 1959 la Asamblea Departamental del Huila aprobó la Ordenanza No. 44 en la cual se promueve el Festival Típico del Huila y la Junta Folclórica Departamental. Tras este importante recorrido histórico, estas fiestas fueron finalmente declaradas como Patrimonio Cultural de la Nación por medio de la ley 1026 del 2 de junio de 2006.
Ha sido así que esta región, especialmente algunas zonas del Tolima y el Huila, se han vuelto el hogar de las fiestas de San Juan y San Pedro que se celebran cada año desde el 23 de junio hasta el 1 de julio.
