DIARIO DEL HUILA, COMUNIDAD
Por: Hernán Guillermo Galindo M
La demanda del servicio de transporte público en Neiva al igual que en otras ciudades se incrementó de parte de los estudiantes de colegios y universidades que han retornado a la presencialidad después de la pandemia. La queja recurrente es la falta de rutas y frecuencias en especial en las horas de noche parar quienes estudian nocturno.
Con el retorno a la presencialidad en colegios y universidades se ha incrementado la movilidad en la ciudad. El transporte de decenas de estudiantes, que desde primeras horas de la mañana salen de sus casas para cumplir con sus horarios, puede llegar a ser relativamente fácil para unos, y para otros una “verdadera odisea” sobre todo para quienes tienen clases en horario nocturno.
Diario del Huila realizó un recorrido por la zona de influencia de colegios y universidades y pudo evidenciar a algunos estudiantes universitarios esperando la ruta del colectivo que los lleve de regreso hasta sus hogares. Las personas aseguraron que les preocupa que no se les garantice la movilidad y seguridad para lograr regresar a sus casas “sin ningún problema”.
Jhon Suarez, estudiante de la Universidad Surcolombiana, dijo que se le dificulta llegar hasta este centro de estudios porque sus clases “siempre son en horario pico” y vive en el municipio de Rivera. “A veces se me dificulta llegar a tiempo”, manifestó.
Y es que paradójicamente la mayor dificultad para conseguir transporte público se presenta en las horas pico, pasan pocos colectivos y los que transitan van llenos o no recogen a quienes están esperando.
Lucía Atehortúa, estudiante de Ciencias en la Usco, solicitó mayores controles ante la “alta” afluencia de vehículos y para que se pueda evitar embotellamientos en la vía.
“Presencié un accidente vial y la Policía de Tránsito no respondió, aun cuando la gente la llamaba. La buseta donde venía le tocó subirse a la parte peatonal y eso fue muy riesgoso”, expresó por su parte Juan Carrillo, estudiante del INEM.
Otro sector de bastante congestión y afluencia de estudiantes es la Carrera 2 con Calle 21 a donde acuden a tomar el transporte público estudiantes del Instituto Técnico superior, la institución Tierra de Promisión, el Sena de la quinta y la sede de Corhuila en el Quirinal, entre otras.
Liliana Castro, estudiante de la Corhuila, manifestó que demoró una hora y media para llegar hasta la universidad porque las vías están “demasiado congestionadas”. “Hay bastantes colectivos, pero no dan abasto y van todos muy llenos, siempre es así en las horas pico, además solo sirven ciertas rutas”, agregó.
Luis Molina, estudiante del Sena, considera que es normal el incremento en la demanda del transporte público debido a que ahora las universidades y colegios regresaron con el 100 % de capacidad, pero que se debe buscar soluciones ante esta problemática.
“Vengo desde Las Palmas y casi todo el trayecto vengo de pie en la mañana y en la tarde, o por la noche se dificulta conseguir transporte de manera pronta. Toca esperar a veces hasta media hora o más”, añadió Molina.
Adriana Peñuela, estudiante de la Universidad Cooperativa, contó las “peripecias” que vive una de sus compañeras debido a que reside en el municipio de Tello y su última clase se extiende hasta las 9 p. m., por lo que debe salir antes de la finalización de su jornada para intentar tomar el último transporte que la lleve hasta su lugar de origen.
“Ella me comentaba que le daba miedo que el transporte pasara tan tarde y no lograra regresar hasta su casa”, sostuvo.
La estudiante de psicología Diana Moreno, relató que para ella ha sido “un poco complejo” movilizarse hasta su universidad debido a que los buses pasan con su “máximo” aforo y debe esperar que pase uno un poco vacío.
“El día que más tarde salgo es a las 8 p. m. y a esa hora es difícil. Muchas veces voy saliendo y me toca correr para que el colectivo no se pase”, añadió Moreno.
Hablan los conductores
Preocupados, así están los conductores de colectivos en Neiva, debido a que sus recorridos son inciertos, solo hay buena afluencia de viajeros en las horas de la mañana y al medio día. No siempre cumplen con la cuota que es alta, “los vehículos no siempre tienen un alto” aforo, se quejan.
Renato González, quien desempeña la “ardua” labor de conductor de colectivo, manifestó que con el retorno de estudiantes de los diferentes colegios y universidades de la ciudad se ha visto un incremento en la cantidad de pasajeros, lo cual ha generado un mayor interés de las empresas por prestar un mejor servicio, pero ha sido difícil cumplir por los baches que queda entre las horas de buena afluencia y baja ocupación.
“Cuando se llenan los colectivos, le da a uno gusto trabajar de esta manera, es cuando hacen falta vehículos, pero no se puede mantener una regularidad para que la dicha sea completa”, sostuvo González. .
El conductor Álvaro Llanos afirmó que las ganancias han aumentado en los últimos días gracias a que los estudiantes han regresado a sus lugares de estudio. “Las cosas tienden a mejorar, pero hay otras circunstancias que nos afectan”, indicó.
Entre tanto, el conductor Carlos Cortes, que conduce un colectivo que cubre la ruta de Cándido a Las Palmas, manifestó que la producción ha mejorado “notoriamente” y que esperan que continúe incrementándose para poder proporcionalmente mejorar el servicio.
Rodrigo Alcántara, otro conductor de colectivo urbano, expresó que tienen altas expectativas con el retorno a la presencialidad debido a que los estudiantes son quienes en su “mayoría” utilizan el servicio.
Soluciones
La verdad es que tanto las autoridades como los usuarios al igual que los propietarios están pendientes de una solución definitiva que beneficie a las partes. Por los lados de las autoridades en Neiva se tienen la perspectiva del SEPT como la solución a todos los inconvenientes que se presentan en materia de transporte público y movilidad en la ciudad. El proyecto está en marcha con algunas dificultades y tropiezos.
Sin embargo, los propietarios y conductores, no todos se sienten incluidos y por el contrario algunos piensan que los van a dejar por fuera del negocio.
“Es bueno que la ciudad se modernice y que haya una alternativa de transporte masiva con confort, calidad y bienestar para los usuarios, pero mientras se da esa solución, que por ahora ajusten las rutas y frecuencias, es algo que necesitamos de inmediato y no da espera”, sostiene Alberto Diaz, estudiante de derecho en la universidad Cooperativa sede Neiva.