DIARIO DEL HUILA, HUILA EMPRENDEDOR
Por: Rolando Monje Gómez
Fotografías: José Rodrigo Montalvo
Aunque para muchas personas la pandemia fue el final de sus proyectos, no es el caso de Francy Villarreal, quien aprovechó su fe, devoción y creatividad para lanzar su emprendimiento. Mientras otros dejaban de creer y ella creía en su idea de negocio y el ‘milagro’ se le hizo convertido en ‘Divina Bendición’.
En medio del temor por la propagación de los contagios del Covid-19 que empezaba a cobrar vidas, en 2020 muchos empezaron a afianzar sus creencias religiosas y su fe, acogiéndose a vírgenes, ángeles protectores, santos y otras imágenes, y es así como aprovechando ese momento para ‘agarrarse de todos los santos’ que en plena pandemia llegó una ‘Divina Bendición’.
‘Divina Bendición’ es un emprendimiento que empezó como una alternativa de entretenimiento y hoy es un medio económico de ingresos para la familia de Francy Villarreal. “Nace en casa, en medio del encierro de la pandemia del coronavirus, en el mes de mayo, cuando estoy haciendo algunas modificaciones en casa y, en medio del aislamiento, se me viene la idea de tener una imagen de una Virgen de Guadalupe, como representación de la fe que en ese momento debíamos tener para afrontar la llegada del virus”, comenta.
Este emprendimiento es muy innovador, porque cada creación, cada producto por ser personalizado es único. No son creaciones mecánicas, aunque la gente pida hacer una imagen a su gusto o tal vez a semejanza de otra, siempre es distinta. “Cada pieza que elaboramos tiene un toque personal, cada brillo, cada empaque tiene un propósito distinto, y creo que es eso lo que nos permite estar hoy en el mercado de las imágenes religiosas de esta ciudad”, afirma Francy.
El nombre de ‘Divina Bendición’, se atribuye a un valor agregado que tienen los productos que elabora, por su belleza, creatividad y bendición porque se relaciona con todo tipo de imágenes religiosas. “Ofrezco todo tipo de imágenes religiosas, elaboradas en diferentes técnicas, colores, motivos y tamaños, al gusto y devoción de cada cliente”, indica.
El grupo objetivo en que está enfocado este emprendimiento no tiene límites, pues en ‘Divina Bendición’ elaboran imágenes para todos los gustos. “El servicio es totalmente personalizado, lo elaboramos al gusto de los clientes y según sus necesidades, pero también a la necesidad del presupuesto”, comenta la emprendedora.
Las piezas que ofrecen en ‘Divina Bendición’ tienen su sello propio, porque cada pieza es única, nunca ninguna es igual a las otras, así la persona solicite el mismo modelo, color y tamaño. “Cada pieza la realizamos con cada detalle, brillo y especial dedicación. “Es por eso que nuestra empresa siempre está dispuesta a realizar una imagen al gusto y de acuerdo a la fe de cada persona”.
“Ofrecemos productos ciento por ciento creados por los clientes, yo lo único que hago es transformarlos, poner colores, amor y mucha dedicación para ellos. Es una opción personalizada de elementos que pueden tener en casa, en una oficina, en un sitio público, en un espacio común, o donde cada uno lo desee”, afirma.
Aunque la cara visible de este emprendimiento es Francy Villarreal Ruiz, su esposo César Augusto Arias Otero, ha sido su principal apoyo y animador de la iniciativa y con él consideran que muy pronto contarán con una tienda física, pues hoy atienden a través de redes sociales y demás herramientas comunicativas.
“Yo creería que, en menos de cinco años estaremos en un sitio donde podamos ofrecer no solo imágenes sino productos para que otras personas, que quieran también emprender lo hagan. Pensamos también en capacitar a través de cursos a todos quienes deseen hacerlo”, comenta.
Durante el tiempo que llevan como emprendimiento, han contado con un buen número de clientes, aunque no tienen un número exacto, si pueden hablar que ‘Divina Bendición’ ha tenido unas 400 ventas de diferentes productos, los que entregan a domicilio, a donde el cliente lo solicite.
Según comenta Francy, dentro de la gran variedad de productos que ofrece, las vírgenes son las más amadas, “por ejemplo, no vas a creer, pero en Neiva la gente es muy devota a cuatro vírgenes: una es la de Guadalupe, la Santa Marta, la de Aránzazu y también la Medalla Milagrosa, esas tres no pueden faltar, pero también hay muchos que piden, para su protección, el San Miguel Arcángel, quien es el ángel más vendido en ‘Divina Bendición’”.
¿Qué tan difícil es emprender?
Para emprender hay que tener claro que el inicio está lleno de dudas, pero luego, cuando la perseverancia está ahí presente, todo se puede. “No es difícil, solo que a veces nos llenamos de temor, de falta de fe, de creer en que nos va a ir bien. Siempre estamos pensando en ¿Y si no se vende?, ¿Y si no le gusta?, y otras muchas preguntas que en el camino nos hacemos que lo único que hacen es estancarnos”, comenta Francy Villarreal.
“Yo empecé vendiendo cada mes solo 100 mil pesos, luego con el tiempo y cuando fueron conociendo mi arte, ya me hacían pedidos de 500 mil, un millón de pesos, y ahí es cuando tú dices, que de verdad hay que creer en que todo lo que emprendemos nos va a salir bien”, afirma.
Francy es la encargada de hacer, decorar y terminar cada uno de los trabajos, pero en este momento cuenta con una persona que a apoya en la elaboración. “Pero esto es una cadena, tenemos a los proveedores de la cerámica, a los proveedores de adornos, también de los empaques y, por supuesto, hasta la persona que realiza las entregas a domicilio”, indica.
Comenta que no ha recibido ninguna capacitación en el tema de emprendimiento, como tampoco apoyo de empresas privadas o del Estado. “Por mi profesión si tengo algunas bases de temas específicos como canales de comercialización y otras herramientas, pero esperamos poder seguir fortaleciéndonos y eso incluye el capacitarnos. Para poder tener un punto físico debemos hacer una inversión, que de alguna u otra forma debemos conseguir”.
Finalmente comenta que “vamos a intentar gestionar algunas ayudas por parte de entes locales; pero la verdad creo que lo haremos independiente; porque la tramitomanía nos puede estancar y prolongar lo que tenemos planeado a corto plazo”.