taxi y encontrar que el conductor lo ha decorado con toda clase de temas, es algo normal para los desprevenidos pasajeros. Pero encontrarse con un pesebre al abordar si es toda una novedad. Esto se vive en las calles de Neiva en donde desde hace unos cuatro años, Jorge Vargas González, hace carreras con un pesebre en la parte frontal de su vehículo.
A sus 33 años, la edad de Cristo, Jorge Enrique Vargas González, se pasea por las calles de Neiva en su vehículo tipo taxi al que le ha acondicionado en el frontal un pesebre. Son unos doce años como taxista de los cuales cinco han sido con pesebre a bordo.
Jorge, además de la devoción al nacimiento del niño Jesús, tiene formación con profundo arraigo católico como quiera que tiene dos familiares que son sacerdotes y él estuvo a punto de irse para el seminario.
Al indagar si lo del pesebre significa más carreras o más ingresos, sostuvo que tiene claro que no lo hace con ese propósito, “lo hago porque me gusta y mi familia ha sido muy religiosa y le ha gustado esta temporada de navidad, entonces yo lo reflejo en el carro con el pesebre, para que la gente también sienta el espíritu de la navidad, el nacimiento del niño Dios”.
Todo esto lo comparte además de los pasajeros con su familia que lo apoya, comenzando por su señora madre que es la que le presta el pesebre, eso si le tocó comprare uno más grande, porque el de la progenitora es especial para ella, ha sido el de muchos años. Tiene también el apoyo de su novia que tiene dos hijos a los que quiere como si fueran suyos.
El pesebre lo armó el siete de diciembre en compañía de la novia, Mara Lizeth, “nos sentamos los dos, lo sacamos de una bolsa en la que lo mantengo guardado, colocamos el tapete, el piso artificial y finalmente pegamos con silicona las figuras, para que no se caigan”, relató.
La novena en el carro
“Literalmente salgo bien temprano, tipo 4 y 30 o cinco de la mañana, prendo el satelital con el que trabajo, comienzo a rezar a novena solo, pero llegado el caso mientras la rezo, sale una carrera, la hago con los pasajeros, pero normalmente la hago solo”.
Cuenta que solo hace unas pocas horas, salió a trabajar, lo llamaron por el satelital, recogió al pasajero, “estaba comenzando a hacer la novena y el señor se interesó y me acompañó a rezarla, no tuvo reparo alguno, dijo antes mejor nos vamos bendecidos los dos”, sumó.
Jorge continúo su relato para comentar, que, gracias a Dios hasta el momento nadie le ha hecho un comentario negativo sobre su iniciativa y, por el contrario, lo felicitan y animan, así le sucedió en la tarde anterior en el que tuvo un inconveniente económico y no estaba con el ánimo arriba, se subió una señora, lo notó desanimado y le manifestó su tristeza por verlo en esas circunstancias, lo que le cambió el ánimo y está para trabajar como debe de ser.
Peticiones
En cada novena le pide al niño Dios por su familia, que la mantenga siempre unida, por su relación por todas las personas cercanas para que les vaya muy bien y en general que todos puedan cumplir sus metas, realizar sus proyectos, que puedan salir adelante pero siempre de la mano de Dios.
Jorge Vargas González es conductor de un carro dentro de una sociedad que tiene con unos compañeros con los que aspiran formar una empresa de taxis a futuro, “espero a corto plazo ser propietario de mi propio carro y entre todos poder salir adelante”.
Por ahora son tres carros y sus conductores los involucrados junto a ´l en el proyecto, de los cuales el único con pesebre es el de Jorge, “el otro muchacho no tiene el espíritu para eso, es creyente, pero no tiene pesebre en el carro.
A manera de mensaje a sus pasajeros y a los neivanos que creen en la novena y el nacimiento de Jesús como conmemoración, “que principalmente sientan lo que están haciendo, que el 24 en la víspera del nacimiento, nazca el niño Dios en el corazón de cada persona, para mantenerse como una persona buena y comenzando por Neiva, nuestra ciudad va a ser mucho mejor para todos, si usted tiene a Dios en el corazón todo va a ser mucho mejor para todos”.
