Diario del Huila, Crónica
Por: Hernán Guillermo Galindo M
Edwin Piamba Losada, lleva toda la vida laboral arreglando ventiladores, oficio que le aprendió a su padre de origen indígena que se instaló en Neiva en el Centro Comercial Los Comuneros desde que lo abrieron al público. Han sido una familia unida que se ha proyectado en el oficio al punto que Edwin y una de sus hermanas ya tiene negocio propio.
Edwin Piamba Losada llegó a Los Comuneros en compañía de su padre, Nelson Piamba a reparar ventiladores en un pequeño local del recién abierto centro comercial que reemplazó al pasaje Camacho que fue demolido para dar paso a una construcción moderna, se dijo en su momento.
“Somos prácticamente fundadores, se podría decir, mi papá abrió un pequeño local y a base de trabajo con mucho esfuerzo, se fue ganando una clientela que con el paso del tiempo le permitió ir expandiendo el negocio”, relata Edwin.
Tanto Edwin como su hermana acompañaban a don Nelson a su local, fueron aprendiendo, se hicieron conocer por su dedicación y honestidad, por eso hoy cada quien tiene su propio local y su propia clientela.
En el pequeño local ubicado en la entrada 4A, de los comuneros se observa toda clase de ventiladores, desde nuevos para la venta como los que están en reparación. En las paredes y mostradores se encuentran repuestos para ventiladores, pero además se puede adquirir repuestos para ollas a presión, planchas y otros electrodomésticos.
“Edwin recuerda que el primer barrio al que llegaron sus padres en Neiva fue el Nueva Granada, en donde hizo parte de la primaria, fueron felices con sus seis hermanos. Su papá siempre ha sido muy trabajador por lo que necesidades no han pasado en la vida, gracias a Dios”, dijo.
Se independizó hace unos ocho años.
Ya en su propio negocio, Edwin, refiere “que estudio hasta bachillerato, terminó en el Inem y se dedicó a hacer lo que más le gusta en la vida. Siempre le ha llamado la atención lo del arreglo de aparatos eléctricos. Además de ventiladores, se especializó en planchas, licuadoras y motores para molinos”.
Ahora reside con su nueva familia en el Barrio Pastrana, la misma está integrada por su señora, Deisy Gómez, también colabora en el negocio especialmente en las tardes y sus tres hijos que estudian. “Todos viven pendientes del negocio porque son muy unidos, así lo aprendió Edwin de sus padres y se lo transmite a sus hijos”, agrega.
La jornada de trabajo comienza a las ocho de la mañana y termina a las siete de la noche de lunes a sábado y abre medio día los domingos, tiene un empleado que le ayuda en la reparación de los aparatos eléctricos y a atender el negocio en la eventualidad que se tenga que ausentar.
“Piamba comenzó arreglando ventiladores y pasó al arreglo de planchas, licuadoras y molinos eléctricos, porque el sistema es prácticamente lo mismo, sostiene mientras está atendiendo a un cliente en unas cotizaciones. Si usted arregla una plancha, usted arregla un ventilador o un taladro, los sistemas son prácticamente lo mismo”, manifestó con seguridad.
Lo del propio negocio está desde hace unos ocho años, que consiguió el local, surtió y comenzó eso si con “la ayuda de su papá que le colaboró en esta oportunidad en lo económico para ser independiente. Lo mismo hizo con mi hermana, por eso ya cada quien maneja su propia clientela, aunque todos vivimos pendientes de todos”, agrega.
“Edwin se declara creyente en Dios al que se recomienda todos los días al iniciar su jornada, ya se hizo vacunar, tiene las dos dosis, por ahora no necesita refuerzo, tiene 37 años de edad. En el caso de la competencia, piensa que no la tiene, de un lado porque están en el negocio su papá y su hermana. Además, por la pandemia nos volvimos más unidos, gracias a Dios para todos hay”, sostiene.
Lo que más mandan a arreglar los clientes son ventiladores, por el clima de la ciudad, es un aparato muy solicitado, han evolucionado vienen con control remoto y táctiles, también se venden ventiladores en buena proporción.
Como siempre lo primero que hay que mirar es si tienen arreglo, comenta: “En muchos casos son desechables y no hay solución distinta a cambiar el aparato, aunque al cliente, a veces no le guste, la solución que le planteamos, pero termina aceptando y llegamos a un acuerdo, para eso estamos para asesorarlos, que se vayan satisfechos, argumenta”.
“En el orden de reparación a los ventiladores a los que se les puede hacer el embobinado o cambio de motor por uno nuevo, le siguen las licuadoras, se revisa si están sonando, si hay que cambiarles los bujes o el cuadrante que es lo que más se les daña a las licuadoras”, relata.
“Lo de las planchas tiene que ver con un fusible térmico que se puede cambiar o reparar. Un nuevo electrodoméstico que están reparando son las freidoras de aire, que se pusieron de moda, sirven para cocinar sin aceite, también se repara”, añade.
Edwin finalmente comenta que no está en redes, que lo pueden encontrar en su local de los comuneros o en el WhatsApp 310 4935620.
En el local se puede encontrar otros electrodomésticos.
