DIARIO DEL HUILA, HUILA EMPRENDEDOR
Por: Rolando Monje Gómez
Fotografías: Suministradas
Una marca de todos y para todos, así define Liceth Collazos su emprendimiento de trajes de baño, Arli, moda y confección. Aunque emprender no es fácil, y la pandemia no ayudó a muchos negocios, en este caso permitió que su modelo de negocio se halla visto posicionado y potenciado. La empresa genera tres empleos directos y dos indirectos.
Liceth Collazos siempre ha sentido pasión por la moda y el buen vestir, y en el momento más crucial de su vida, en el 2020, cuando se convirtió en madre de Arya, decidió con el apoyo de su esposo, Oldrich Baldrich Gómez, formalizar un emprendimiento al que llamaron Arli moda y confección, como homenaje al amor de madre e hija combinando los nombres Arya y Liceth. Una empresa orgullosamente opita.
“En Arli diseñamos, confeccionamos y comercializamos vestidos de baño para mujeres, hombres, parejas, niños, niñas y familias enteras, completamente personalizados, con estampados únicos, innovadores, con altos estándares de calidad; bajo el concepto ‘prosumer’, en el cual nuestro cliente tiene la oportunidad de participar en la creación del diseño, lo que nos hace únicos y especiales en estos momentos en el mercado, resaltando la belleza y el carisma que caracteriza a los huilenses”, manifiesta Liceth.
Arli es una marca de todos y para todos, cuyo eje principal es la familia, sin dejar de lado la individualidad de mujeres, hombres, niños y parejas, dándose a conocer principalmente a través de redes sociales como Facebook, WhatsApp, Instagram. “Nuestra atención se brinda principalmente mediante redes sociales, línea directa de WhatsApp (3213908600), cuentas de Facebook e Instagram @arli_modayconfeccion. Pero lo más valioso e importante, ha sido la recomendación y difusión voz a voz que han tenido nuestros productos, gracias a la satisfacción de nuestros clientes; quienes nos recomiendan y nos dan a conocer a su entorno”, señala Liceth Collazos.
Los productos de Arli están pensados para todas las personas de la familia.
Los servicios que ofrecen son completamente personalizados, con interacción permanente con el cliente, donde éste se hace partícipe del proceso de diseño y creación del producto, que termina siendo confeccionado ajustado a su gusto y características propias. “La competencia son empresas con reconocimiento local, tanto por atención como por calidad en sus diseños, pero lo que nos hace diferentes es la participación del cliente en el proceso, permitiendo incluso cambios y ajustes al producto final después de entregado, sumando a esto los precios que son accesibles para todos”, comenta la emprendedora.
El confinamiento y la necesidad de autocuidado y luego la apertura gradual de la sociedad, han permitido que su modelo de negocio se halla visto posicionado y potenciado, tanto así que pronto brindarán a sus clientes la oportunidad de atención en un punto físico, donde puedan apreciar de forma directa la amplia variedad y calidad de sus productos.
Generando impacto
Los gestores de este emprendimiento son Liceth Collazos Panqueva, odontóloga de profesión, pero con gusto y pasión por el diseño y la moda, nacida en el municipio de Acevedo, orgullosamente opita, casada con Oldrich Baldrich Gómez, madre de Arya, pieza clave y fuente de inspiración de este proyecto, que cada día crece, gracias a la dedicación y esfuerzo y por su puesto por la aceptación de los clientes.
En las proyecciones a cinco años, Liceth percibe a Arli “marcando tendencia con innovación tanto en la materia prima de calidad como en la forma de diseñar haciendo del concepto prosumer algo atractivo y fácil de usar por todos nuestros clientes. Ser reconocida como una empresa con sentido social dándoles participación a madres cabezas de hogar. Con proyección nacional e internacional con puntos físicos en diferentes ciudades y regiones del país”.
“No tenemos un número exacto de clientes, pero cada vez generamos más impacto; lo que se ve reflejado en el aumento constante de nuestros seguidores en redes sociales, que se traduce en el crecimiento de clientes fijos y potenciales, inclusive nos han invitado a formar alianzas con marcas afines. No estamos enfocados en vender por vender; al permitir que nuestros clientes se sientan seguros con lo que lucen, mediante la participación directa en el proceso, sentimos que humanizamos el negocio, dándole así no solo un valor comercial, sino también un valor social, que es algo de lo que adolece el mercado”, manifiesta.
La gran variedad de diseños y colores son una característica de la empresa.
Dentro de los productos que más solicita la gente están los combos de vestidos de baño familiares y de pareja y últimamente también se han hecho populares, accesorios que acompañan a nuestros vestidos de baño, como pañoletas y salidas de baño.
Arli es una empresa orgullosamente opita.
Liceth considera que parte de su éxito se debe a lo innovadora que es su empresa, “siempre estamos a la vanguardia en las tendencias de la moda, con estampados de calidad, ajustándolos siempre al gusto de cliente, siempre intentando hacer de los procesos, ágiles, cómodos y atractivos, para siempre ser la primera opción al momento de pensar: necesito un vestido de baño”.
No es fácil emprender
Arli moda y confección, genera actualmente tres empleos directos, encargados de la parte de diseño y operación, y dos indirectos que hacen parte de la distribución. Aunque no han recibido apoyo económico de forma directa, si han contado con asesorías en el tema de emprendimiento por parte del Centro de Emprendimiento y Generación de Oportunidades, CEGO y el Sena en Neiva, las que han sabido capitalizar.
“Hemos realizado cursos de márketing digital, diseño y moda; de igual forma capacitaciones del CEGO y la Universidad Surcolombiana, lo que nos ha permitido hacernos visibles mediante la participación en ferias y eventos importantes, como el Reinado Nacional del Bambuco y vistiendo a las candidatas de Miss Universe Colombia 2021, en su entrevista privada con el jurado calificador”, comentó.
Los clientes trabajan directamente en el diseño de sus trajes.
Liceth afirma que emprender es “extremadamente difícil, sobre todo en un país como el nuestro, donde los emprendimientos y negocios pequeños, se ven acosados por los complejos procesos de constitución y la alta carga tributaria, lo que dificulta la subsistencia a largo plazo y la competencia con las grandes superficies. Afortunadamente esto está cambiando gracias a la política gubernamental, de fomentar y proteger a la pequeña empresa”.
LOGO DE ARLI
