Juan Daniel Garzón, es un joven que, mediante el arte, la lúdica y diferentes métodos, incentiva el amor propio y la inclusión a la comunidad. Actualmente ha desarrollado un proyecto llamado Fashion Dreams Talentos Modernos donde involucra a niños, jóvenes y adultos en pro de un desarrollo social.
Juan Daniel Garzón Perdomo, es un joven de 21 años de edad nacido en Neiva, se considera talentoso, artístico y empírico en el mundo de la danza y el arte, a través de diferentes proyectos que ha ejecutado por medio de distintas fundaciones, especialmente en Sonrisas de Amor y Paz, ha compartido con la comunidad y se ha podido dar cuenta que mediante el arte puede transformar vidas y generar espacios de cultura, transformación social y demás.
Es por ello, que ha decidido, mediante la ayuda y colaboración de la Fundación Sonrisas de Amor y Paz, crear un proyecto donde involucre a jóvenes, como niños y adultos en distintas actividades donde mezclen las sonrisas y el libre desarrollo.
“La idea nace desde Sonrisas de Amor y Paz, mediante la labor social, desde la risoterapia se identificó la necesidad de un proyecto novedoso en los niños, niñas, adolescentes y adultos mayores que atiende la fundación mensualmente y, teniendo en cuenta mis habilidades artísticas y que he apoyado a la Fundación desde hace 4 años, nace la idea de implementar un valor agregado artístico y cultural”, expresó Juan Daniel Garzón.
El proyecto llamado Fashion Dreams Talentos Modernos, se basa en la inclusión y el trabajo social en pro de la población de la comuna Seis, sur de Neiva, expresa Daniel que por medio de los distintos trabajos y actividades les da entender a las personas que participan sobre la importancia del amor propio.
“El proyecto trata de hacer inclusión social mediante el arte y talentos de los niños, niñas, adolescentes y adultos mayores de la comuna Seis, resaltar la belleza del ser humano sin estereotipos y trabajando día a día por una buena autoestima de quienes participan, amándose y respetándose con o sin sus defectos físicos para fortalecer sus emociones y salud mental”, dijo.
¿Cómo recibe apoyo?
Daniel expresa que es un tema complicado, ya que, cada evento necesita de un presupuesto considerable para la ejecución, “las actividades se han realizado con el apoyo ciento por ciento de la Fundación, con recursos propios, mediante rifas y actividades, para cumplir con las necesidades del proyecto”.
Debido a que los talleres se dictan para generar inclusión, amor propio y demás aspectos esenciales para la vida, la edad aquí no importa, menciona Daniel, sostiene que todos son bienvenidos tanto para colaborar como para generar conocimientos y participar en las distintas actividades ya sea dotando de recursos a la Fundación.
“Trabajamos con todas las edades, tenemos vinculados desde los 2 años de edad hasta los 68 años de edad disfrutando de las clases de pasarela, modelaje, etiqueta y con el apoyo constante con una psicóloga para fortalecer la autoestima de las personas que deciden participar en nuestros talleres ofrecidos”, manifestó.
Su razón
Afirma que decidió emprender este camino de la labor social, ya que, él también fue estudiante y que mediante Sonrisas de Paz y Amor creció, tanto profesional como personalmente, debido a que aprendió los distintos talentos que hoy lo hacen ser quien es.
“Decidí, como Juan Daniel Garzón, trabajar este proyecto inicialmente desde la fundación que me vio crecer artísticamente y me ha brindado espacios de diversión y ocupación de mi tiempo libre de una manera constructiva, y yo quiero devolver el favor ocupándome también de los pequeños, así como lo hicieron conmigo”, dijo.
Mediante el arte, sostuvo Daniel, que podemos expresar sentimientos y emociones representados, asimismo, la oportunidad de hacer su labor social mediante el arte lo más significativo y constructivo que ha recibido durante sus distintas labores sociales que ha ejercido durante este año.
Lo que ha realizado Juan Daniel Garzón es de orgullo, según Liliana Gómez, representante legal de la Fundación Sonrisas de Amor y Paz, es la muestra viviente de que las personas podemos desde lo poquito que tenemos ayudar a los demás, así como nos han ayudado a nosotros.
“Es un orgullo ver crecer en la Fundación grandes artistas y que aporten sus habilidades para nuestra labor en salud mental. Daniel creció con nosotros, llevando sonrisas a muchos rincones del departamento del Huila, siendo el voluntario Huellitas (nombre artístico) y hoy verlo como ‘teacher’ brindando sus conocimientos, ha sido un regalo de Dios”, manifestó Liliana.
Mediante actividades lúdicas incentiva el amor propio y la inclusión a la comunidad.
