DIARIO DEL HUILA, CRÓNICA
Por: Leidy Catalina Durán Vásquez
Fotos: Tatiana Ramírez
La señora María Francynet Osorio López reside en la ribera del río Las Ceibas en el asentamiento Bajo Tenerife II en Neiva desde hace aproximadamente tres años, ella es madre cabeza de hogar de tres hijos, uno de seis años, el otro de tres y el menor recién ha cumplido el añito.
La mujer de 26 años de edad recién llegó a este lugar con sus pequeños hijos residía en un pequeño lote en el cual pagaba 120 mil pesos de arriendo mensuales, con el pasar de los años, según manifiesta María a ella iban a censarla con el fin de conocer cuántas personas vivían en este lugar, cuando esto ocurrió los dueños del predio se enteraron y decidieron sacarla.
“La pareja dueña de este lote apenas se enteró de que habían venido a censarnos, decidieron sacarme porque pensaron que yo había dicho que esto era mío, y no es así yo dije la verdad que ahí pagaba arriendo y dije quiénes eran los dueños, pero ellos no entendieron eso y me sacaron con mis tres hijitos”, narró María.
Ahora donde vive esta mujer con sus tres hijos es en el mismo asentamiento para más cerca a la orilla del río, situación que hace aún más complicada la vida de esta mujer, debido a que cada vez que llueve Las Ceibas se desborda haciendo que sus pocos enseres se vean deteriorados con el agua.
Maria Francynet se dedica a vender arroz con leche puerta a puerta para poder sacar a sus hijos adelante, de acuerdo con la mujer, los vecinos de los barrios aledaños ya conocen su historia y por eso le colaboran con la compra de un arroz con leche que cuesta 5000 mil pesos.
“Yo a mi hijo mayor lo tengo estudiando, y con la venta del arroz también le compro los útiles, les doy de comer, y compramos lo poquito que podamos, porque tampoco es que me alcance para mucho, mis hijos solo dependen de mí, nosotros estamos acá porque no me alcanza para pagar arriendo en una vivienda más segura, pero ahora estamos en peligro, con las fuertes lluvias que han caído últimamente nos vamos a salir quedando sin nada, a mí me da mucho miedo un día de estos despertar y no encontrar a mis hijos conmigo”, sostuvo la madre cabeza de hogar.
En la misma situación de la señora Maria Francynet hay más de 50 familias que hoy piden a gritos ayuda para poder salir del peligro al que están expuestas cada vez que llueve con gran intensidad y el río busca su cauce.
“No es la primera vez que se me mojan las cosas, hace tres días que también llovió muy duro acá en Neiva, se me mojó todo, hasta los colchones, apenas hizo sol yo los saqué para que se me secaran algo porque a donde iba acostar a mis hijos, y hasta hoy apenas se me estaba secando algo, y vea otra vez todo inundado, esto también da mucha tristeza, tener que levantar a mis hijos para que el agua no se los lleve”, dijo la mujer entre lágrimas.
La mujer, también manifestó que actualmente ella no recibe ninguna ayuda del Gobierno Nacional, ni tampoco ha podido afiliarse para recibir Familias en Acción, solicita que la ayuden a obtener algún recurso por parte de estos beneficios, para así lograr mejorar un poco su situación económica.
“Yo me acuerdo que cuando vivía con mi hermano y logró meter a mi hijo en el programa de Familias en Acción, y él era el que recibía esa ayuda, pero ahora que yo estoy sola con mis hijos la verdad desconozco si a él aún le dan esa ayuda, porque a mi realmente no me llega nada”, concluyó la mujer.