DIARIO DEL HUILA, CIUDAD
Por: Hernán Galindo
Tras la disminución de la tercera ola de la pandemia y la urgencia de reactivar la economía, ciudadanos hablan del duro impacto de la crisis y plantean alternativas para crear plazas de trabajo.
Las cuarentenas y restricciones que se vivieron en el país explicaron las cifras de desempleo en el mes de julio en Neiva, según cifras del Dane. Y es que el impacto de la pandemia del covid-19 en materia de ocupación y trabajo en la ciudad ha sido de duro impacto.
Ante las cifras, que no son nuevas, son desde comienzo de la pandemia, aunque tampoco eran los mejores al cierre de 2019, antes de la emergencia social y en salud, Diario del Huila preguntó a los neivanos la opinión de la situación, qué ideas se les ocurren para reactivar plazas de trabajo y qué plan de choque deberían implementar las autoridades.
“Es claro que se requiere acelerar las estrategias de fondo para la generación de empleo. Una política estructural que vaya más allá de la meta de superar el impacto pandémico y volver a los índices anteriores a la emergencia. Los subsidios estatales a las nóminas empresariales y el mismo incentivo para contratar a jóvenes entre 18 y 28 años son apuestas importantes, pero con un efecto coyuntural”, manifestó el economista Carlos Yepes.
Y destaco que para ese plan estructural se requiere más audacia del sector público en cuanto a impulso a la reactivación y fortalecimiento empresarial, mejora sustancial del clima de negocios, mayor equilibrio en la carga tributaria para los sectores más intensivos en demanda de mano de obra, superar los cuellos de botella en la competitividad y acceso a mercados externos, así como atraer más inversión extranjera y acelerar el plan de infraestructura del orden nacional, regional y hasta local.
“Igual, debe implementarse un marco legal y de respaldo financiero más tangible para las nuevas dinámicas laborales relacionadas con el teletrabajo, el comercio electrónico y el auge en la generación de productos, bienes y servicios derivados de una mayor utilización de las tecnologías y las telecomunicaciones”, señaló Andrés Rujana, consultor económico de la Cámara de Comercio.
Empleo barrial
El mensaje es claro: la reactivación productiva debe ir acompañada de una recuperación más efectiva de las plazas de trabajo, tanto de las pérdidas en medio de la crisis como en la generación de nuevas. No habrá reflote económico y social sólido mientras no se consiga este objetivo.
“Deberían pensar en la creación en los barrios de brigadas de trabajo que ejecuten pequeñas obras públicas para reparar vías, cuidar parques, prevenir deforestación en áreas rurales”, manifiesta Sigifredo Campos, desempleado desde comienzo de la pandemia, después de perder el cupo en un restaurante que cerró por la crisis.
Su compañera, Cecilia Serrato, está de acuerdo. Ella tiene un trabajo de medio tiempo en un almacén de cadena.
Añaden como opciones de generar plazas de trabajo de personas como ellos en “reforzar la enseñanza de los niños, pintar y refaccionar colegios y edificios públicos, ofrecer ferias populares de comidas, arreglar y recuperar parques, que los deportistas den clases y así”, dicen.
Para Miryan Rocío Gómez, trabajadora social, que encontramos en la Oficina del Trabajo, poniendo una queja por justo despido de una empresa de vivienda, manifiesta que muchos proyectos los adelantarían de plan de choque de empleo los pueden adelantar la Alcaldía dándoles prelación a mujeres, jóvenes y mayores que no reciban otras ayudas del Estado.
“Que quiten la plata de tantos programas que no sirven, o gastos de burocracia, que acaben la corrupción. Ahí está la plata. Se aportaría de su presupuesto se podrían generar muchos empleos de esta forma. En otras ciudades y países lo han conseguido”, afirma.
Sobre la posibilidad de bajarse el salario o contemplar una flexibilización de los contratos dado para generar empleo formal hay opiniones divididas.
“Sólo se aplicarían para nuevos empleos generados por el sector privado a partir de septiembre de 2020 y hasta que termine la emergencia de la pandemia”, respondió Gladys Peña, contadora, egresada de la Usco.
Tal vez sí, pero si se paga el 80 % del salario mínimo y la totalidad de la salud y el seguro de riesgos profesionales”, opina Griselda Claros, quien labora periódicamente en una empresa de energía.
Clara Marcela Riaño, no está de acuerdo en que se afecte el pago, “porque el costo de las cosas sigue igual o más alto. Mire lo que ha pasado con los paros. No le jalaría”, afirma.
Inversión pública
Ella, ingeniera ‘varada’ desde antes de la pandemia, asegura que lo que se sugiere es que el Gobierno acelere la inversión pública en las vías terciarias. En ese sector hay plata, hay presupuesto nacional y le sirve al campo para mejorar la comunicación y la comercialización. Manteniendo hasta tres turnos si es necesario. Eso generaría miles de empleos”, dijo.
Por su parte, el abogado Ricardo Gómez, con empleo en la Oficina del Trabajo, señaló que el país necesita tomar medidas ya para generar empleo y no se puede dar el lujo de esperar a que haya una misión (de expertos) para adelantar una reforma laboral.
“Es urgente aliviar las cargas tributarias a las nóminas, flexibilizar la contratación, acelerar y destrabar la construcción de grandes obras civiles y brindar mayor apoyo a las pymes”, aseguró.
Los más afectados somos los jóvenes menores de 25 años y las personas de menores ingresos e informales, alega Francy Toro, egresada de biología, una de las tres hijas de un hogar en el barrio Obrero.
“El reto –señaló– está en que al tiempo que se protege la salud de la gente, se mantienen las fuentes de empleo para que puedan reactivarse a medida que la situación vaya mejorando”.
Su novio, Miguel Restrepo, con trabajo en una compañía de telefonía, apunta que ha leído que en países se evitó la destrucción de puestos con ayudas de los gobiernos a empresarios en materia de alivios tributarios y costos a la nómina.
“Y en otros se aplicó una política enfocada en subsidios al desempleado, la cual resulta demasiado costosa”, destacó.
Reynel Bermúdez, de la Cámara de Comercio, destacó que ya hay medidas para aliviar plazas de trabajo, especialmente para la juventud.
Mencionó “los incentivos para el primer empleo, el reconocimiento de las prácticas como experiencia laboral y formación para el trabajo en todos los niveles, que se ajuste a las necesidades del empleador”.
Sin embargo, destacó la importancia de la aceleración de proyectos de iniciativas público-privadas, como fuente rápida de generación de empleo.
El economista Juan Vargas planteó un régimen tributario especial puede motivar la inversión en la región.
“El régimen preferencial, entre otras cosas permite exceptuar del impuesto a la renta a las empresas que llegan a la región y las existentes, siempre y cuando puedan demostrar en sus indicadores que están generando trabajo”, explicó.
Apoyo a Neiva y no más paros
Como ciudad intermedia, Neiva también necesita ayuda especial, manifestó: Requerimos un capital de riesgo que permita nuevos emprendimientos, el fortalecimiento de nóminas y mejorar la capacidad tecnológica para ser más competitivos y generar plazas de trabajo.
Jorge Pérez, restaurantero, concluyó diciendo que es urgente ayudarle a renglones de la economía que son muy fuerte en la región para reactivar la economía.
“El sector de los servicios, de los restaurantes, el turismo, los hoteles, los sitios de diversión o recreación que han sido muy afectados, especialmente para mujeres, muchas de ellas cabeza de hogar”, aseguró.
Todos los consultados concluyeron que la ciudad ni el departamento ni el país aguantan más aislamientos totales, ni bloqueos de las vías, que señalan como parte de la grave situación que atraviesan.
Las mujeres, muchas de ellas cabeza de familia buscan alternativas de trabajo.
