Por: Johan Eduardo Rojas López
En este mes de la mujer seguimos resaltando el valor de tantas personas que diariamente aportan a la sociedad y con amor quieren dejar un legado. Valentina Guzmán, no solamente realiza sus propios sueños, sino que también apoya a otras mujeres que están en busca de una oportunidad para hacer emprendimiento.
Valentina Shaikh Guzmán es una joven oriunda de Neiva, que con tan solo 20 años tiene claro su propósito de vida y busca aportar a la sociedad. En este mes de la mujer seguimos resaltando el valor de tantas personas que diariamente aportan a determinado contexto y con amor quieren dejar un legado.
Esta joven viene de una familia académica que ha logrado superarse y le han inculcado una educación sólida para emprender su camino. Hoy en día es la directora de comunicaciones, marketing y publicidad de la organización “Expomall”, una empresa de eventos y ferias que apoyan a los emprendedores y en esta oportunidad a las mujeres que buscan salir adelante.
Fue criada en Rivera, Huila, al lado de sus abuelos, quienes le inculcaron ese amor por las letras y el valor del servir. “Todas las noches me leían un cuento y luego me hacían debatir sobre eso. De allí surgió mi amor por esta disciplina”, cuenta.
La joven espontánea, alegre, pero estricta, está a la espera de graduarse como profesional y sabe qué camino continuar. “Desde décimo, a mis 15 años, por un proyecto de trabajo social, me enamoré de eso porque pude interactuar con la gente. Hacíamos chocolatada con pan, para compartir con los habitantes de calle y yo me sentaba a hablar con ellos. Siempre me ha gustado relacionarme con las demás. Posteriormente, a mis 17 años decidí estudiar comunicación y aunque en un principio no era como tal lo que quería, luego me di cuenta que esa carrera era todo lo que buscaba”.
Amante de la poesía, con una sensibilidad notoria por servir a la comunidad y actual administradora de una empresa que la ha llevado a retarse. Además, tras su corta edad tiene completamente clara su postura frente al rol de la mujer en el mundo, hizo parte de un grupo feminista de la universidad. “El papel de la mujer en la sociedad es invaluable, porque, somos un pilar de todo. Aunque tristemente siguen pasando cosas atroces y hay un panorama que a veces nos hace perder las esperanzas, estos movimientos permiten recuperar la fe y unirnos a la lucha, que al final es de todas”.
Por eso, hoy por hoy, se siente dichosa no solamente de visibilizar sueños ajenos, que se convierten en propios; sino, que también de apoyar a todas las mujeres que están en busca de una oportunidad de hacer emprendimiento.
“Siempre buscar la manera de cumplir nuestros sueños y apoyar a las personas que sabemos que lo necesitan. Porque recordemos que sin el otro no podremos llegar muy lejos, hay que unirnos como mujeres, como gremios, como seres humanos para conseguir cosas exitosas”, dice.
